Todos los pescadores que recorren los ríos tarde o temprano lanzan su señuelo al pie del muelle de un puente. Evidentemente tienen razón, porque es un lugar estratégico para un gran número de especies y, en particular, para los carnívoros.

Una desviación actual
La primera razón por la que los pilares de los puentes son excelentes para pescar es que canalizan y desvían la corriente del río. Crean aceleraciones de corriente y centralizan el suministro de alimento en vetas de agua específicas y marcadas. En la cabeza del pilote y en los laterales en particular, esta es una posición estratégica para los cacho en busca de cualquier insecto a la deriva.

La calma tras el montón
Detrás del muelle del puente, en cambio, hay una contracorriente y un colchón que constituyen una zona de calma donde se acumula el alimento. A la vez cómoda desde el punto de vista energético y estratégica desde el punto de vista alimentario, esta zona de calma es una posición privilegiada para encontrar luciopercas en particular. Dependiendo de su actividad y de la fuerza de la corriente, puede encontrarlas en la zona de calma, en la vena de agua o en el borde de ambas.
Un puesto abarrotado
Como cualquier obstáculo, los pilares de los puentes acaban acumulando muchos residuos a la deriva y esto aumenta exponencialmente su poder de atracción para las distintas especies de peces. De hecho, les permite esconderse o acechar en función de su estatus en la cadena alimentaria. Por otro lado, esto hace que la pesca sea mucho más difícil y costosa en términos de equipamiento. Por lo tanto, es muy importante controlar los ángulos de lanzado y la dirección de la línea para evitar enganches. El uso de anzuelos Texas es una excelente alternativa.

Un baluarte contra el sol
Lo que hace que los muelles de los puentes sean un lugar excelente para los peces carnívoros y, en particular, para la lucioperca, es que ofrecen permanentemente una zona de sombra. Esta especie es especialmente sensible a la luz y, sobre todo cuando el agua está clara, buscará las zonas con menos luz. La lucioperca no siempre estará activa, pero a menudo estará presente alrededor de estas estructuras.

Un muro que facilita la caza
Al igual que las orillas o la superficie, los pilares de los puentes constituyen literalmente un muro contra el que los carnívoros presionarán a sus presas para capturarlas más fácilmente. Al reducir la posibilidad de huida, es más fácil capturarlas. Por eso, cuando se ven cacerías, suelen producirse cerca del pilote. Incluso fuera de este contexto, el número de aciertos aumentará a menudo a medida que sus lanzamientos y derivas sean más precisos y se acerquen más a la estructura.