La lubina es una especie que se puede pescar en una gran variedad de lugares. Desde la orilla o mar adentro, puede encontrarlas casi en cualquier lugar. Nos centraremos en la zona cercana a la costa, es decir, a no más de 2 millas náuticas de la costa. Esto requerirá que el pescador disponga de una embarcación, pero sin necesidad de un barco potente que se trague las millas y se adentre mucho en el mar. Es en esta zona cercana a la costa donde se suele pescar mejor.
Bretaña tiene la ventaja de contar con muchos bajíos cerca de la costa. Es fácil encontrar zonas profundas incluso cerca de la costa. Tendrá la suerte de contar con una gran variedad de zonas de pesca en las que se alternan la arena, las mesetas rocosas, los criaderos de ostras y las playas, por citar sólo algunas.
Esta proximidad a la costa le ofrecerá lugares de pesca de entre 5 y 25 m, aunque es posible encontrar descensos mucho más profundos.
Dependiendo de la zona, tendrá más o menos corriente y sus plomadas para señuelos tendrán que adaptarse en consecuencia.
Detallaremos el equipo necesario para este tipo de pesca, dirigida exclusivamente a la lubina.
El juego de caña y carrete como base
El conjunto de caña y carrete es esencial para cualquier pescador y debe cumplir las especificaciones de la pesca en este tipo de zona.
Este tipo de pesca requiere una caña que permita el uso de señuelos como el Black Minnow de 120 mm o 140 mm con cabezas de plomo de 12 a 30/40 gramos o incluso el Crazy Sand eel slug de tamaño 180 mm.
Para animar mejor este tipo de señuelos, es preferible tener una caña bastante larga. Esto te dará mucha palanca y facilitará la pesca con tirón.
Se recomienda un mínimo de 2,30 m o, como en este caso, el uso de una caña Daiwa Saltist AGS III 832 en 10-35 gramos o la Saltist AGS III 802 en 7-28 gramos.

Con este modelo, el 832, estamos en la longitud máxima para la pesca desde embarcación. Dicho esto, con semejante longitud, la distancia de lanzado es notable, al igual que la facilidad con la que se pueden realizar los tirones. Sin embargo, esto es más restrictivo para la pesca scratch, por ejemplo, donde una caña un poco más corta sería una buena elección.
Para conseguir un conjunto ligero que le permita disfrutar de la pesca durante horas, elija un carrete de tamaño 3000. Los carretes de este tamaño pesan alrededor de 250 gramos, lo cual es bastante razonable. Tenga cuidado con la proporción. Es uno de los puntos más importantes a tener en cuenta. Un ratio alto le proporciona una mayor recuperación por vuelta de manivela. La pesca de la lubina en tracción requiere este tipo de característica para recuperar rápidamente el streamer residual en el tirón. Se recomienda un mínimo de 90 cm por vuelta.
La Daiwa Lexa 3000 CXH fue elegida como caña para el Saltist, ya que reúne todas las características necesarias para este tipo de pesca.
Elección de señuelos
La oferta es enorme y no siempre es fácil acertar, sobre todo para el pescador novato. Sin embargo, hay algunas cosas seguras, y FIIISH es una de ellas.
La marca bretona que no necesita presentación ha conquistado el corazón de los pescadores empezando hace más de 10 años con el indestructible Black Minnow que ha obrado milagros. Su facilidad de uso y su montaje con anzuelo Texas conquistaron los corazones de los pescadores. Diez años después, sigue siendo igual de eficaz y continúa atrayendo a los peces.

Desde entonces, la gama se ha ampliado con la llegada de señuelos de tipo babosa como el Crazy Sand Eel, que se presenta en varios tamaños, siendo los más utilizados el 120, 150, 180 y 220.

Por último, a medio camino entre el Crazy y el Black Minnox, el Crazy paddle tail es un señuelo muy eficaz para todas las pescas lineales. Este señuelo cónico, acabado con una cola de pala, es eficaz tanto si se pesca en zonas donde hay mucho lanzón como cuando el bass persigue pequeñas azules.

Todos estos señuelos constituyen una base sólida para una búsqueda serena de la lubina. A medida que vayas avanzando, desarrollarás sin duda tu selección personal.
Trenza y fluorocarbono
La elección del trenzado y del fluorocarbono asociado al bajo de línea también debe tenerse en cuenta en función de la técnica elegida.
En este caso, al principio de la temporada, el agua no es tan clara y, por lo tanto, es inútil elegir un fluorocarbono demasiado fino. Además, es posible que te encuentres con una gran mancha amarilla, que sin duda luchará más que una lubina y seguramente intentará volver al fondo.
Para el trenzado, un modelo de 8 cabos con una resistencia de unas 20 libras será adecuado y hará una buena combinación con un fluorocarbono de 30 cent.
El Lexa 3000 ha sido equipado con trenzado Daiwa Tournament EVO 8 en PE 1.2 equivalente a 22 lbs.

Su finura y redondez ofrecen un buen deslizamiento por las anillas, lo que permite largas distancias de lance.
Ahora está equipado para atacar la temporada de pesca marítima en busca de lubinas, pero también de otras especies presentes en las costas del Canal de la Mancha y del Atlántico.