Cuando se viaja, comprar aparejos de pesca una vez llegado al destino puede parecer interesante, para aprovechar precios más bajos o productos que no se distribuyen en Francia. Sin embargo, es importante informarse sobre el mercado real, ya que puede ser muy diferente de lo que se piensa.
El mercado francés
El mercado europeo, y especialmente el francés, está muy desarrollado, con numerosas referencias, técnicas y marcas procedentes de los 4 puntos cardinales del mundo con influencias diversas, como francesas, suecas, japonesas, americanas... Esta diversidad no se encuentra en todas partes, por lo que no hay que esperar necesariamente encontrar todo aquello a lo que se está acostumbrado, sobre todo cuando se viaja fuera de Europa.

Si tomo el ejemplo de Canadá, un pescador de black bass podrá encontrar lo que busca en las tiendas de las grandes ciudades, porque la pesca con señuelos es muy popular allí y los equipos desarrollados por las marcas americanas se encuentran fácilmente. En cambio, un pescador exigente de luciopercas, lucios o lubinas que llegue con la esperanza de encontrar lo que necesita in situ se llevará rápidamente una decepción, ya que la pesca de estas especies no está muy desarrollada en Canadá. Será entonces complicado encontrar equivalentes a lo que uno está acostumbrado a encontrar en nuestras estanterías francesas. Y aquí sólo hablo de la pesca con señuelos, porque no existe la pesca con jigs y la pesca de la carpa está en pañales. Esta situación se repite de forma diferente en cada destino, por lo que es necesario informarse bien para no encontrarse desprevenido una vez sobre el terreno.
Pescar de otra manera
Esta abundancia de marcas en el mercado francés es una verdadera ventaja a la hora de viajar. De hecho, no hay que dudar en llevar equipos que no se utilicen en el país de destino, ya que esto puede marcar realmente la diferencia sobre el terreno. Además, pescar con equipos que se conocen permite ser eficaz rápidamente, mientras que con los nuevos siempre es necesario un tiempo de adaptación.
Los sitios web
Hay que tener cuidado con las páginas web, ya que no siempre son representativas de lo que se puede encontrar en la mayoría de las tiendas. Su capacidad para vender por correo les proporciona una gran audiencia, nacional e incluso internacional, por lo que pueden permitirse ofrecer muchas referencias. Una tienda de pesca, por el contrario, almacenará material que con toda seguridad venderá localmente, en relación con su público. Sin embargo, si tiene una dirección fija durante su estancia, estos sitios pueden ser una buena ayuda para que le entreguen el material que busca, o incluso para hacer un pedido antes de su llegada y encontrar sus artículos lo antes posible.
El material
A la hora de buscar material disponible sobre el terreno, no sólo hay que centrarse en los señuelos o las cañas, sino también en el resto, que es igual de importante, como trenza, clips, anillas rotas, anzuelos, pinzas, fluorocarbono, bajos de línea de acero...

Tomar la temperatura
Por último, aunque no se entre necesariamente en una tienda de pesca para comprar algo, es interesante ir allí para hablar con los lugareños y adentrarse en el ambiente del país, o incluso para admirar la decoración, como en la famosa tienda Bass pro de Estados Unidos.