Técnicas de pesca del lucioperca con señuelos blandos

Aunque las luciopercas pueden elevarse por encima del agua cuando están más activas, se pescan mejor cerca del fondo con señuelos blandos. Técnicos y táctiles, requieren mucha concentración y un control preciso de los movimientos y la dirección de la línea.

La pesca del lucioperca con señuelos blandos en los ríos puede practicarse de varias formas diferentes que hay que dominar y alternar para adaptarse a las exigencias del día. Sin embargo, todas tienen el mismo principio rector: están cerca del fondo y, por este motivo, para evitar que se enganchen, hay una serie de requisitos previos comunes a todas las técnicas si queremos que sean eficaces.

Lanzar y conducir la línea

El lance debe hacerse de cara a ti o ligeramente río arriba, dependiendo de tu peso. El contacto con el fondo nunca debe hacerse aguas arriba de tu posición, de lo contrario tu sedal creará una barriga y arrastrará tu señuelo blando por el fondo... Inevitablemente se enganchará.
Una vez que el señuelo haya hecho contacto con el fondo, debe levantarse ligeramente para iniciar la animación. La caña debe mantenerse en un ángulo de unos 45° respecto a la superficie del agua y apuntando ligeramente río arriba. Es esencial mantener el sedal tenso para mantener el señuelo en tensión y obtener toda la información posible sobre el fondo y sentir las picadas.
Para amplificar la sensación de esta información, puedes poner el dedo índice o el pulgar en la parte en blanco del bastón.

Canne perpendiculaire et orienté vers l'amont par rapport à l'axe du courant et
Varilla perpendicular y orientada hacia arriba en relación con el eje de la corriente

Lineal

La pesca con sedal es la forma más sencilla de pescar luciopercas. Consiste en una recogida continua del carrete, con algunas pausas para que el señuelo se hunda hasta el fondo y siga la topografía.
Después de lanzar, levanta el señuelo del fondo y empieza a recuperarlo lentamente. Tendrás que encontrar el peso adecuado para mantener el señuelo cerca del fondo y que no suba al agua.

Doigt sur le blank pour une meilleure sensibilité
Dedo en la pieza en bruto para mayor sensibilidad

Rascar

La pesca al ras requiere una mayor destreza técnica que la pesca al ras. Después de lanzar, primero se toma contacto con el fondo y se levanta el señuelo con uno, dos o tres tirones ligeros (el estado de ánimo del día determinará la amplitud, la velocidad y la frecuencia) para que derive en un espacio de unos treinta centímetros por encima del sustrato.

A continuación, guía lentamente el señuelo hacia abajo (bajando la caña) para que entre en contacto con el fondo y repite la operación. Tienes que estar muy concentrado, en primer lugar para sentir cómo tu señuelo toca el fondo y, sobre todo, para identificar y visualizar el mapa del lugar. Si no sigues a tu señuelo hasta el rompiente, lo sobrevolará y tendrá pocas posibilidades de ser atacado... Esta es a menudo la zona de ataque, ya que las luciopercas suelen situarse en el fondo del cuenco para interceptar y sorprender a sus presas. Por lo tanto, es fundamental "adaptarse" a las variaciones de profundidad.

Une dérive proche du fond réussie
Una deriva cerca del fondo con éxito

Pesca de deriva

La pesca a la deriva es un método más suave y ligero que la pesca al ras. Hay que asegurarse de que el señuelo se acerque al fondo de la forma más natural posible. Se trata de una forma de pesca con plantilla en la que se entra en contacto con el fondo a intervalos regulares y se deja que el señuelo se desplace de forma natural río abajo como si fuera una presa en apuros.
El truco está en encontrar el peso adecuado para que esta deriva sea lo más natural posible. Saliendo más y más, encontrarás el peso estándar para empezar tu salida en un punto concreto. Luego tendrás que afinar el peso para adaptarlo al estado de ánimo del día.
Intenta hacerte una imagen mental de cómo se moverá tu señuelo mientras lanzas para poder realizar los movimientos correctos.

Drop shot

El drop shot es un método de pesca al que no soy muy aficionado, pero que resulta especialmente eficaz, sobre todo en invierno. Consiste en presentar un señuelo a la deriva por encima del plomo utilizando un nudo palomar. Los movimientos deben ser rápidos para la perca, pero mucho más lentos para la lucioperca, interrumpidos por pausas muy largas.

Como habrás comprobado, en la pesca del lucioperca la concentración es fundamental. No sólo para controlar perfectamente la deriva, sino también para sentir bien el contacto con el fondo (cada vez más discreto cuanto menor sea el peso de la cabeza del jig) y sentir cada picada. Además, el conocimiento preciso de la topografía de los lugares de pesca es esencial para seguir el relieve.

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