La pesca del lucioperca es una actividad especialmente interesante, ya que requiere mucha prospección, adaptación y dominio técnico. Puede que su defensa no sea la más impresionante, pero los grandes cabezazos característicos de las grandes luciopercas no tienen rival. Por último, pero no por ello menos importante, la variedad de golpes de que es capaz es a la vez desconcertante y excitante.
Un pez técnico
El lucio, la perca, el black-bass y el siluro son receptivos a muchos más tipos de señuelos y técnicas que el lucioperca. Hay que reconocer que su pesca requiere una mayor versatilidad, lo que los hace más interesantes de seguir.
La lucioperca puede pescarse de diversas formas, pero la mayor parte de la pesca se realiza con señuelos blandos cerca del fondo y, por lo tanto, requiere una mayor destreza técnica.
Muchos le dirán que han pescado luciopercas con aparejos rudimentarios, con señuelos enormes precedidos de un bajo de línea de acero, y que su legendaria desconfianza, que es el origen de su reputación, está bien usurpada. Como todos los peces, cuando están en pleno frenesí alimentario son fáciles de atraer, pero la constancia a lo largo de una temporada es harina de otro costal.
Con fama de temperamentales, sin duda lo son menos que el lucio, pero son mucho más sensibles a la presentación de su señuelo para ser engañados.

Localización de luciopercas
Para pescar luciopercas con regularidad, es esencial localizarlas. El lugar donde las retengas depende de 4 factores:
- La luz
- Oxígeno
- La comida
- Y por último, el mirador, que viene determinado por la estructura y la luminosidad.

La luz
La lucioperca es un pez que se alimenta de fuego y, por lo tanto, puede aprovechar los niveles bajos de luz para cazar. La intensidad de la luz es, por tanto, un factor determinante en la profundidad a la que pueden mantenerse los peces. Siempre estarán en el límite entre lo visible y lo invisible para sorprender a sus presas. La luminosidad depende del color del agua, de la hora del día, del tiempo y de lo concurrido que esté el lugar. Así, cuanto menor sea la luz, a menos profundidad las encontrarás, y viceversa. En aguas altas o con luz diurna, pueden capturarse en 50 cm de agua a 1 m de la orilla.

Oxígeno
El oxígeno es vital para la supervivencia de todas las especies, y las luciopercas no son una excepción. La concentración de oxígeno en el agua depende de su circulación y temperatura. Por eso, cuanto más calor hace (sobre todo en verano), más hay que buscarlas en zonas muy oxigenadas, es decir, profundas o con mucha corriente.

La comida
El último factor es la presencia de alimento. El lucioperca, como todos los depredadores, elige sus lugares de alimentación en función de su instinto de supervivencia, pero también de alimentación, y siempre buscará un lugar seguro con abundante comida. La presencia de alimento está relacionada con la corriente de alimentación, pero también con la estructura del lugar.
En una sección posterior, veremos los distintos lugares donde se pueden encontrar estos peces y la importancia de la estacionalidad en sus zonas de retención.