Los golpes de lucioperca suelen ser sutiles y desconcertantes

Pez difícil de engañar, la picada de la lucioperca es la recompensa a una buena presentación de su señuelo. A veces muy violenta y otras de una sutileza poco común, requiere una gran concentración y puede ser un buen indicador de los ajustes estratégicos que hay que hacer durante una salida.

Las luciopercas pueden atacar tu señuelo con violencia, como una descarga en el brazo, pero también pueden ser muy discretas. Estoy convencido de que nos perdemos picadas que ni siquiera sentimos, así que si tienes la más mínima duda o sensación anormal, debes atacar. Un día, con la experiencia, no sabrás por qué has picado y, sin embargo, la lucioperca estará ahí.

Llaves con muchas caras

Los golpes de lucioperca pueden ser muy variados. El más típico y emblemático es el famoso disparo de escopeta Pero también suelen ser imperceptibles.

Puede ser un pequeño tirón, una ligera succión, una pesadez, una especie de arañazo o chisporroteo en la línea o simplemente una ligera pérdida de tensión que es sinónimo de un simple golpe de nariz de la lucioperca.

A veces golpeo un pez y no puedo decir por qué, ¡pero el pez está ahí! Es una sensación anormal, pero indefinible.

Recuerdo especialmente una vez, en plena crecida, en la que pesqué un cebo. En esta época del año, siempre pesco muy despacio con largas pausas y añado un triple ladrón. Durante un carrete de animación, tuve la extraña sensación de que mi señuelo había sido empujado, como si acabara de dar un salto hacia delante. Lancé por reflejo más que por conciencia y un bonito lucioperca de unos 80 cm fue capturado. Se enganchó en el triple ladrón justo por un trozo de piel en el borde de la boca. Simplemente había empujado al intruso con la boca cerrada.

Le sandre fait parfois des touches très discrètes
La lucioperca a veces hace apariciones muy discretas

Una pancarta perfectamente estirada

En este sentido, si quieres controlar perfectamente tu señuelo, necesitas una línea tensa, lo que también es esencial si quieres enganchar luciopercas con regularidad. Las picadas violentas siempre serán perceptibles, pero los otros dos tercios no se habrán identificado y eso es lo que explica la diferencia de eficacia entre dos pescadores.

Pour bien sentir les touches, une bannière tendue est indispensable
Una pancarta tensada es esencial para sentir bien las teclas

Vinculado a la tecnología

La fisonomía de los golpes de la lucioperca está estrechamente ligada a la técnica utilizada, que a su vez depende del estado de ánimo del momento.

Cuanto más rápida, agresiva y lineal sea la animación, mayor será el impacto. Eso se debe sencillamente a que los peces estarán más activos y tu pancarta perfectamente tensada.

En cambio, a medida que reduces los plomos, ralentizas las animaciones y te detienes en el fondo, los golpes se vuelven más finos y discretos. Esto puede explicarse por el hecho de que te diriges a peces oportunistas que no están necesariamente en fase de alimentación, y que este tipo de presentación requiere menos tensión en tu estandarte.

Interpretar las claves

Las picadas fallidas, sobre todo las que muestran un ataque nasal o labial, tienen un significado que debes analizar. Del mismo modo, una lucioperca capturada con el triple ladrón al final del pico es un pez que no ha atacado francamente al señuelo.

Esto significa que su mensaje les molesta y les interesa... Pero no lo suficiente Pero una cosa es cierta, las luciopercas están ahí, poco activas pero inclinadas a atacar un señuelo que corresponda a sus expectativas.

Por eso, cuando registro este tipo de pulsaciones, intento entenderlas como un mensaje: "falta un factor desencadenante en tu planteamiento". Podría ser el peso o la propia animación, pero también podría ser uno de los factores secundarios, o una combinación de estos distintos parámetros.

Así que juego con el tamaño y el color de mi señuelo y, por último, con la forma de la cabeza del jig para intentar conseguir golpes más directos.

Un leurre bien engamé est synonyme d'une présentation parfaite
Un señuelo bien ensartado es sinónimo de presentación perfecta

Adaptarse para seguir siendo eficaz

Hay que interpretar el estado de ánimo de los peces a partir de estos mensajes, y las picadas violentas, sobre todo entre dos aguas mientras desciende el señuelo, deben tomarse como una señal de gran actividad. Para aprovechar al máximo este momento, hay que pescar de forma agresiva y rápida.

Los señuelos correctamente cebados y los golpes limpios significan que estás pescando de la forma correcta. Por último, los que bajan el ritmo y se vuelven más discretos deberían llevarte a cambiar parcialmente tu enfoque para seguir siendo eficaz.

Por eso pesco la fabulosa lucioperca. Por la complejidad de su pesca y por ese toque único que nunca se sabe qué forma tomará... Se requiere concentración y rigor, ¡pero conseguir engañarlas regularmente es una recompensa sin igual!

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