Hemos visto que las carpas se reúnen en zonas de espera donde se sienten cómodas. Cuando se identifican estas zonas, es posible practicar diferentes tipos de pesca que, más allá de las sensaciones sentidas, nos permiten conseguir buenos resultados. ¡Pongámoslas donde están!

La plataforma Zig
Cuando hay termoclina, las capas superficial y del fondo no se mezclan. Como resultado, las carpas a veces pasan mucho tiempo cerca de esta capa de agua. Para pescarlas, hay una solución: ¡el aparejo en zigzag! Este tipo de pesca consiste en pescar entre el fondo y la superficie. Adapta la longitud de tu bajo de línea en función de la altura a la que estén activas las carpas. Por supuesto, utiliza cebos flotantes (espumas de colores, boilies, etc.) para que todo el bajo de línea despegue.

La llamada del aparejo en zigzag se hace sentir a menudo cuando, en mitad del día, ¡estamos esperando LA picada! Es muy probable, sobre todo cuando la totalidad del agua se ve afectada, que haya que abordar la pesca con aparejo en zigzag. Esto lo hace ideal para situaciones en las que la pesca está bloqueada.
Me baso en el principio de que es mejor ser activo en la pesca e intentar algo que esperar durante horas a una posible salida. Quien no arriesga, no gana. Insisto en conocer la zona.
De hecho, es importante probar esta técnica cuando estés familiarizado con la población y sus hábitos. Una capa de agua habitada y un cebo rítmico y apetitoso te proporcionarán momentos mágicos.
Volveré sobre este tema con más detalle en otro artículo.

Pesca en la superficie
La pesca de superficie también es una técnica alternativa para capturar carpas cuando se congregan cerca del agua. Y qué mejor momento para probar este método que durante el verano, cuando puedes escaparte a la orilla del agua con poco equipo y sondear a la ligera los lugares más remotos.
Algunos caladeros son más adecuados que otros. De nada sirve ser obstinado si nunca se ven carpas en la superficie. Este tipo de pesca proporciona momentos inolvidables sin sobrecargarte de equipo ni quitarte mucho tiempo.

Se adapta muy bien al ritmo que llevamos en verano Me gusta pescar de forma oportunista. No te olvides de los lugares turísticos donde mucha gente pone cebos a nuestros queridos ciprines, sin tener en cuenta su voluntad. ¡Estupendo!
Puertos en algunos lagos, restaurantes en las orillas... Depende de usted encontrar a estos peces en la superficie y determinar los mejores momentos para conseguir que piquen, ya que no siempre están decididos a pesar de su presencia.
Pesca a caballo
La pesca con caña también puede ser muy eficaz si se practica a las horas adecuadas. Yo suelo practicar este tipo de pesca en zonas poco profundas donde la actividad de los peces dura sólo unas horas. Me encanta pescar a primera hora de la mañana, cuando el nivel de oxígeno disuelto es alto.
La pesca nocturna suele ser menos eficaz porque la temperatura del agua sigue siendo muy alta y los niveles de oxígeno bajos. Esta técnica de pesca ligera le permite estar listo en muy poco tiempo y obtener buenos resultados si conoce bien los caladeros. Se pueden pescar varios puestos en pocas horas. Una auténtica delicia y una apuesta segura.

Para mí, estos tres enfoques son los reyes en verano. Te permiten ser totalmente activo en tu pesca y, por lo tanto, adaptarte lo mejor posible a las condiciones y, por lo tanto, al comportamiento de las carpas. Bien aplicados, estos enfoques te proporcionarán una eficacia real.
Así que mi enfoque del verano puede resumirse en dos palabras: alternar y optimizar.