A mosca, las carpas, ya sean comunes, espejo o cuero, son un verdadero desafío cuando se las busca a la vista en poca agua con imitaciones de las presas naturales de las que se alimentan a lo largo del año.
Estos ciprínidos suelen ser muy grandes y tienen una relación potencia-peso superior a la de muchas especies de peces. Una vez enganchada, la carpa despega como un torbellino, ¡desenrollando seda y lomos! Es un auténtico pez deportivo para el pescador a mosca que busca un nuevo reto. Este pez es más técnico de lo que parece y a menudo los pescadores a mosca lo juzgan mal.
¿Dónde pescar carpas a mosca?
Las carpas tienen la capacidad de adaptarse a todos los medios acuáticos, especialmente a los pobres en oxígeno. Por ello, pueden encontrarse prácticamente en cualquier parte, a veces incluso en los tramos bajos de nuestros ríos de salmónidos de segunda categoría.
Se pueden encontrar en todas las masas de agua, lagos, estanques y canales, aunque a veces el agua es más turbia y no se puede pescar con la vista.
Hay que investigar un poco para encontrar estos "puntos" donde a menudo se les puede ver merodeando en aguas bastante claras, a veces con la espalda fuera del agua y la cola en el aire (tailing) donde entran en muy poca agua para alimentarse, como los macabíes o las palometa. Esto puede ocurrir en un lago o estanque, pero muy a menudo en un río, donde el agua es lo suficientemente clara como para ver a los peces.
Las acciones de pesca son muy similares, y el reto es igual de duro, ya que tienes que averiguar qué están cogiendo del fondo y presentárselo bien. Los rechazos son bastante habituales y acercarse a ellos no tan fácil. El más mínimo ruido, un manotazo o un aterrizaje impreciso y ¡a correr!
Lejos de dejarse engañar, deberá combinar discreción y paciencia, ya que pueden ser extremadamente recelosos, sobre todo en las zonas donde hay cierta presión pesquera.

La acción de pesca
Las mejores situaciones de pesca son cuando las carpas están en aguas poco profundas y buscan comida, idealmente en pequeños grupos. En este caso, de vez en cuando se levanta una pequeña nube de lodo.
En este caso, ofréceles tu imitación cuando estén comiendo y tengan la cabeza gacha y coloca tu mosca justo delante del pez. Espera y, si no se deciden, mueve tu mosca ligeramente por encima del fondo para atraer su atención.
También pueden encontrarse en muy poca agua, en lechos de algas, en busca de larvas acuáticas no necesariamente en el fondo, a veces entre dos aguas. En esta situación, lo ideal es lanzar bastante cerca de ellas o interceptar su trayectoria si se mueven mucho.
Otra situación es cuando los peces se mueven cerca de la superficie. Es posible interceptarlos con moscas ligeras que se hundan suavemente. Las larvas de libélula y las moscas poco pesadas con muchas patitas funcionan muy bien en esta situación.
Las carpas a pleno sol, inmóviles, son casi inexpugnables. Están durmiendo la siesta. No pierdas el tiempo.

¿Qué equipo debo utilizar?
Se recomienda no bajar de cañas de 9 pies para línea de 8, excepto en el caso de que sólo encuentres pequeñas carpas y jureles y cambies a línea de 7 o incluso de 6.
Para contrarrestar a un pez poderoso, a veces es necesario utilizar sedal de calibre 9, sobre todo cuando algunos pescadores acechan a ejemplares que se acercan o superan los 10 kg en ríos donde utilizan la corriente.
Así que necesitas un carrete con suficiente backing (150 m mínimo), especialmente para ríos, y un arrastre progresivo y potente. Los equipos Bonefish son ideales.
Para pescar en aguas poco profundas utilizamos principalmente líneas flotantes WF con un eje que no es ni demasiado corto ni demasiado largo (alrededor de 10 m). Cuanto más clara y poco profunda sea el agua, más suaves y precisas deben ser las líneas.
Un bajo de línea de un largo y medio de caña es adecuado. No debe ser demasiado rápido, ya que lo que se busca es precisión más que velocidad, y debe ser un poco más suave para que pueda aterrizar delicadamente cerca del pez. Lo ideal es una punta de fluorocarbono de 28° a 35°. Más aún si pescas carpas muy grandes, o si la zona es boscosa o está sembrada de trampas. Tendrás que adaptar el lance al tamaño del pez y a los obstáculos presentes en el lugar.

Selección de moscas para la pesca a pez visto de la carpa
Es importante conocer la dieta de las carpas que se intenta capturar, ya que son muy oportunistas y a veces pueden ser selectivas.
No estamos hablando de imitaciones de pan o maíz, que no forman parte de su dieta natural, aunque estas imitaciones pueden funcionar. Ese es un tipo de pesca completamente diferente.

Según la época del año, las carpas pueden buscar todo tipo de presas ricas en proteínas. Las más conocidas son cangrejos de río, sanguijuelas, gusanos, larvas de quironómidos y libélulas, peces pequeños, pero también caracoles de agua y todo tipo de larvas acuáticas, incluidos los gusanos del fango. Les encantan todos. Pero a veces también se alimentan de polen, semillas e insectos terrestres. La observación es la clave para elegir la imitación adecuada a su comportamiento y a la estación del año.
Las moscas más utilizadas son streamers de conejo y/o marabú en negro, marrón u oliva, montadas con la punta del anzuelo hacia arriba para situarla en el fondo frente al pez.