Peces nadadores para la apertura de la pesca de la trucha

Los peces nadadores también son señuelos de trucha que sin duda debe tener en su caja de aparejos para la apertura, siempre que distinga entre los distintos tipos de peces nadadores.

Aún conocidos comúnmente como "Rapala", los señuelos duros o peces nadadores, tengan babero o no, ¡son formidables cuando se trata de pescar truchas!

Los diferentes tipos de señuelos duros para la trucha

Existen varios tipos de señuelos duros para la pesca de la trucha, y aunque algunos son muy parecidos, como es el caso de los minnows, o señuelos babero, su densidad los hace muy diferentes, tanto en su acción natatoria como en la profundidad a la que se mueven.

Los pececillos para trucha se presentan en 3 densidades principales: flotantes, de suspensión y de hundimiento.

Los flotadores permanecen en la superficie, como su nombre indica, y cuando te recuperas se hunden bajo la superficie gracias al babero, subiendo instantáneamente cuando haces una pausa.

Los señuelos de suspensión se hunden hasta una profundidad determinada durante la recogida, pero cuando ésta se detiene el señuelo permanece completamente suspendido, sin hundirse ni elevarse.

Por último, los pececillos hundibles son señuelos más densos que se hunden en cuanto entran en el agua, más o menos rápidamente en función de su densidad.

También existen los señuelos lipless, que también se hunden y generalmente aletean al descender.

En cuanto a los tamaños, existe una amplia gama en el mercado, desde los peces nadadores más pequeños, de apenas 3 cm, hasta señuelos que pueden superar los 15 cm, la elección dependerá del entorno, del tamaño de la trucha buscada y, sobre todo, ¡del tamaño de las presas de la trucha en el entorno!

Equipo para la pesca de la trucha con peces nadadores

A diferencia de los señuelos blandos o las cucharillas bamboleantes, los peces nadadores son señuelos que tiran de la caña, con más o menos fuerza según el tamaño de su punta. Por eso es importante elegir un modelo que no tenga una acción de punta demasiado blanda, ¡tanto por comodidad como por la calidad de las animaciones!

La potencia vendrá determinada por los señuelos más utilizados, por ejemplo si el pescador suele utilizar señuelos de entre 60 y 80 mm para un peso generalmente entre 7 y 10 g, entonces la elección de una caña de 3-12 g es relevante. En cuanto a la longitud, una vez más es el entorno el que la determinará, aunque una caña de entre 2 m y 2 m20 es un buen compromiso para pescar en ríos de tamaño medio, ríos e incluso lagos.

Un carrete de tamaño 2500 equipado con un trenzado fino y resistente (PE0,6 a PE0,8) y rematado con un bajo de línea de fluorocarbono de 0,16 a 0,28 mm es el complemento perfecto. La elección del diámetro del fluorocarbono es un dilema complicado. Hay que mantenerlo lo más fino posible para garantizar la discreción y la buena presentación de los señuelos, pero sin correr el riesgo de que se rompa, por lo que los parámetros a tener en cuenta son la naturaleza del medio (rocas afiladas o no, etc...) el tamaño del pez objetivo y la turbidez del agua (no tiene sentido bajar demasiado el diámetro si el agua es pesada).

El uso de clips es muy recomendable, tanto por la facilidad de cambiar de un señuelo a otro como por la libertad de movimientos que da a los señuelos. Los anzuelos pequeños específicos para peces nadadores, como el Duolock BKK, son muy discretos y resistentes, incluso en tamaños pequeños.

En cuanto al aparejo, aunque los peces nadadores suelen ir equipados con triples, se pueden aparejar con anzuelos sencillos, con o sin púas según la elección del pescador y la legislación vigente, o con assists, que ofrecen más flexibilidad durante la lucha, evitando que la trucha se agarre y se desenganche.

Las diferentes pruebas de natación con truchas

En los ríos, cuando el agua no es muy profunda, es preferible utilizar señuelos flotantes o suspendidos para evitar el riesgo de quedarse demasiado enganchado. Estos señuelos se recuperan bien en una sola línea, lo bastante rápida para prospectar con rapidez y dirigirse a peces activos, o bien haciendo pausas de duración variable.

Los señuelos en suspensión pueden incluso detenerse durante varios segundos, dejando al pescador pescando aunque sólo sea a la deriva en la corriente. No es raro que se produzca una picada en cuanto se reinicia la animación.

En cuanto el agua se vuelve más profunda, tanto en los grandes ríos como en los lagos, el uso de señuelos hundibles cobra todo su sentido. En primer lugar, su densidad permite, en general, alcanzar distancias de lanzado mucho mayores, por lo que basta con dejarlo hundirse hasta la profundidad deseada e iniciar una recuperación bastante rápida, intercalando numerosas sacudidas (pequeños golpes con las púas) que desequilibrarán el señuelo para facilitar la identificación e imitación de una presa que huye o está herida. La alta densidad de los pececillos que se hunden también facilita el agarre cuando la corriente es fuerte, lo que suele ocurrir cuando el agua está suficientemente alta en el momento de la apertura. No obstante, ¡ten cuidado de pescar con la caña en alto para reducir al mínimo los enganches!

En cuanto a los señuelos lipless, infravalorados pero sin embargo muy eficaces, sobre todo en los lagos, la mejor animación consiste en lanzar lo más lejos posible, dejar que se hunda permaneciendo muy atento durante la fase de descenso, ya que no es raro recibir un golpe en ese momento. A esto le sigue una recuperación no demasiado rápida con un ritmo regular de golpes de señuelo, algo así como animar un señuelo de superficie "paseando al perro" durante unos metros, luego una pausa de unos segundos con la banderola tensa, ¡y así sucesivamente! Estos señuelos y esta animación funcionan muy bien con peces educados que reaccionan menos a los pececillos

¿Y por qué no swimbait? `

El swimbait articulado es un señuelo duro bastante específico que se utiliza generalmente para lucios y black bass, ¡pero también es un señuelo duro que empieza a ser más popular entre los pescadores que buscan grandes truchas! Estos señuelos multiseccionales tienen una acción natatoria muy natural y encantadora, por lo que los modelos de hundimiento lento de entre 8 y 14 cm pueden utilizarse en determinadas zonas donde las truchas no temen atacar presas grandes, ¡y sobre todo donde los pescadores no temen utilizar señuelos grandes!

Los swimbaits son muy fáciles de usar, ya que una simple recogida lineal sigue siendo la animación más eficaz, ¡y las picadas suelen ser muy violentas! Quizás una nueva forma de destacar entre los demás pescadores en la jornada inaugural e intentar batir un nuevo récord

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