Un conjunto para pescar peces pequeños
Cuando se practica la pesca de altura, es frecuente encontrarse con un gran número de peces pequeños a los que apenas afecta la presión pesquera. Su gran número permite divertirse con un equipo fino durante todo el año. Lo ideal es que las cañas que utilicemos puedan soportar entre 100 y 150 g, ya que la deriva y la corriente pueden obligarnos a usar plomadas más pesadas para mantener el aparejo vertical.
En cuanto al carrete, no dudes en elegir uno sólido, ya que ascensos de más de 100 metros con 2 ó 3 peces en la línea pueden dañar rápidamente el equipo. También necesitarás una buena capacidad, de unos 250 metros de trenza de 12 centésimas. El tamaño ideal es el de un carrete 4000, que es a la vez cómodo de usar y suficientemente potente para soportar las tensiones de este tipo de pesca.
Un conjunto para pescar peces gordos
En determinadas zonas y en ciertas épocas del año, los peces que se pueden encontrar cuando se practica la pesca de altura pueden alcanzar tamaños y pesos considerables. Por eso es esencial tener siempre a mano un equipo potente para que no te pille desprevenido cuando piquen los peces grandes. Recomiendo encarecidamente el lanzado, ya que es mucho más fácil arrastrar grandes pesos en aguas tan altas.
También es una cuestión de comodidad, ya que los pesos pesados cansan al hacer spinning. Elige un carrete de casting diseñado para el mar, de tamaño 300, muy sólido y con una gran capacidad de sedal. Equipado con un trenzado de 16 o 18 centésimas, este tipo de carrete te dará más posibilidades de pescar. En cuanto a la caña, la potencia ideal es de 30 lb, ya que peces como el congrio y la lucioperca son luchadores muy potentes. Esta caña también te permitirá levantar rápidamente a los peces del fondo, que intentarán raspar para romper tu sedal y liberarse.
¿Y los montajes?
Tus aparejos, ya estén diseñados para pescar peces pequeños o grandes, deben ser muy sólidos. Es mejor reducir el número de peces pequeños, que ya es muy alto, que perder un pez grande porque el aparejo es demasiado frágil. No dudes en utilizar sedales de gran diámetro, ya que a esta profundidad una gran parte de la luz no llega a los peces. Más allá de los 150 metros, la oscuridad se instala y un pez no puede distinguir realmente entre una centena de 30 y una de 60.
