La pesca del salmón en los ríos japoneses se rige por una serie de códigos. En las redes sociales y en Instagram, estos códigos son fácilmente identificables y poco a poco se van abriendo paso en los corazones de los aficionados a la trucha y a los aparejos. Echemos un vistazo a lo que nos inspira Japón. Es una cultura interesante de conocer para los pescadores de señuelos, ya sean nostálgicos o estén a la vanguardia de las últimas tendencias.
Cuidados estéticos
El material es muy a menudo vintage y francamente retro. Cuanto más auténtico y poético sea el equipo, ¡mejor! Cada detalle cuenta, desde la bolsa y el estuche de cuero hasta el pez nadador de madera hecho a mano y el carrete retro Abu o Mitchell. Conocemos la propensión de los japoneses a llevar al límite el detalle y la pasión. Cuando se trata de truchas de río, lo tenemos cubierto.
El placer de pescar no consiste sólo en el número de capturas o el tamaño de los peces, sino en hacerlo de la forma y con el equipo que tenga sentido, desde el punto de vista de un coleccionista.

Esto significa que prestamos casi más atención a las magníficas redes de raquetas con sus coloridas redes de algodón que a los peces que hay dentro.
Las cañas son reliquias de bambú partido o fibra de vidrio maciza. Cañas pesadas pero muy parabólicas para pasarlo en grande en lances cortos en ríos y luchar contra pequeños salmónidos de aguas blancas.
El arte y la forma
A través de las fotografías de los peces en la red de desembarque, los japoneses quieren destacar el equipo que condujo a la captura, más que la captura en sí. Igual que algunos pescadores dicen que "un señuelo topwater cuenta el doble", aquí la filosofía es la misma. Cuanto más original y auténtico sea el material, más notable será la captura.

¿Una tendencia que se impone en Francia?
En Francia, algunos aficionados japoneses siguen esta tendencia. Hay que decir que los equipos son especialmente difíciles de encontrar (¡es difícil encontrar piezas raras de coleccionista en buen estado!) y que el paquete completo puede ser extremadamente caro
Este es claramente el caso del pequeño ABU Cardinal 3, cuyo precio no deja de subir. Es difícil encontrar uno por menos de 150 euros en buenas condiciones Otras alternativas son posibles, como un robusto Mitchell 408 en lugar de un 308 PRO, que también es muy caro, o un Cardinal C3, que es más reciente que el Cardinal 3, pero tiene el mismo aspecto retro.

¿Sólo equipos antiguos?
El objetivo es disfrutar de equipos originales. El equipamiento vintage de coleccionista es uno de ellos, ya que la búsqueda de determinados modelos de equipamiento es una pequeña aventura en sí misma. Pero también puedes fabricar tus propios accesorios, utilizando materiales nobles como la madera y el cuero...
Así que es posible encontrar artesanos, que pueden considerarse artistas, fabricando equipos y accesorios de la misma forma que lo hacían en los primeros tiempos de la pesca a spinning o con señuelos ultraligeros. En la web se pueden encontrar redes de desembarque, cajas y kits hechos a mano y portacañas, por citar sólo algunos ejemplos. Tampoco hay que olvidar los numerosos señuelos de madera hechos a mano, con formas y firmas originales.

¿Quieres empezar? Si tienes poco presupuesto, el mejor sitio para empezar es un mercadillo o internet. Puedes encontrar un pequeño Mitchell 308 a buen precio. Si te gusta el bricolaje, también puedes fabricar tus propios accesorios únicos basándote en lo que veas en Internet.