1 - Sticks de superficie
El Surface Stick es uno de los señuelos más versátiles y resulta eficaz en muchas situaciones, incluida la pesca en zonas rocosas poco profundas sometidas a corriente, donde pocos señuelos son capaces de llegar. En cuanto a la animación, un lento paseo del perro con largas pausas funciona muy bien.

2 - Los gusanos
La lombriz, o senko, es el señuelo por excelencia. No es un señuelo que le permita cubrir terreno rápidamente, pero cuando ha avistado un pez o un lugar específico que podría albergarlo, es uno de los señuelos más eficaces. Un montaje wacky, es decir, con un solo anzuelo en el centro, o un montaje con anzuelo tejano son muy adecuados.

3 - Swimbaits blandos
Un simple sábalo montado en un Texan, o en una cabeza de plomo para zonas más profundas es un señuelo muy bueno para la lubina. Es preferible un tamaño de entre 10 y 15 cm y colores preferiblemente naturales y/u oscuros.

4 - Propbaits
Los pequeños propbaits, aunque no figuren entre los señuelos más utilizados, son muy eficaces con las distintas especies de black bass. Como estos modelos se hunden, la única animación posible es hacerlos volver continuamente, a una velocidad constante en la superficie. La principal ventaja de estos señuelos es que pueden utilizarse en zonas de corrientes poco profundas.

Para la lubina, suelo utilizar señuelos más discretos y menos ruidosos que para la lubina, aunque los señuelos mencionados en uno de los artículos anteriores también funcionan bien con esta especie. Es más bien el propio entorno, con la presencia de corriente por ejemplo, lo que definirá los señuelos a utilizar.