Densidad complementaria para pececillos que se hunden
Casi todos los tipos de peces nadadores son relevantes para la trucha en un momento u otro. Los jerkbaits flotantes o suspendidos estuvieron de moda durante unos años, pero ahora se utilizan menos, equivocadamente. Los señuelos que se hunden están en alza y están eclipsando injustamente a estos swimbaits de menor densidad.

Estos peces nadadores flotan en la superficie o permanecen suspendidos (densidad neutra igual a la del agua). Su baja densidad hace que tengan poca inercia y sean fáciles de mover. Su labio corto y su densidad no les permiten desplazarse en profundidad. Deben reservarse para arroyos y ríos pequeños o en zonas con corrientes débiles. Son muy atractivos cuando se pescan lenta e insistentemente. Se retuercen y trabajan incluso cuando se les enrolla lentamente. Esto suele desencadenar ataques de los peces que se rinden ante la presencia del intruso si insiste en utilizar este tipo de peces nadadores.

En los campeonatos del mundo de Francia, fue un tipo de pesca que me funcionó bien en la primera ronda y que algunas naciones copiaron en la segunda Había que pescar río abajo, lentamente, con un señuelo muy nadador y vivo para que las truchas lo interceptaran.
Imprescindible en verano
También son muy útiles para llegar a lugares donde no se puede lanzar directamente. Basta con dejarlas derivar corriente abajo, bajo ramas, raíces y follaje, para llegar a lugares concurridos donde los peces recelosos suelen estar al acecho.
Estos peces nadadores flotantes y suspendidos se mueven entre dos aguas. Son complementarios a los señuelos de hundimiento o de babero grande, sobre todo cuando se quiere obligar a los peces a subir e interceptar el señuelo que pasa por encima de sus cabezas. Cuando las truchas no reaccionan a un señuelo presentado en el fondo, en las capas más bajas del agua, no dudes en presentarles un señuelo que se mueva por encima de su cabeza y sea fácilmente perceptible. Por último, pero no por ello menos importante, su acción natatoria amplia y natural, ya sea en línea recta o con una sacudida animada, es una imitación perfecta de un pez en vuelo o en apuros.
Este tipo de señuelo es esencial en verano o durante los periodos de estiaje, cuando el agua está baja y clara y la corriente es débil.

Otro punto fuerte de estos peces nadadores es que son muy fáciles de manejar, incluso para los principiantes. No se hunden, hay menos riesgo de que se enganchen y son fáciles de nadar.
Una caña medianamente rápida con un carrete relleno de nailon servirá perfectamente para pescar en pequeños arroyos en verano.