Tiempos de cambio
Tras un largo periodo de aguas cálidas, la temperatura del Mediterráneo ha bajado y ofrece nuevas oportunidades a los pescadores.
Los vendavales, más frecuentes en esta época del año, permitirán a los pescadores embarcados buscar lobos. Con mar en calma, durante el día, podrá observar más caza. Cuando el sol se ha puesto, es hora de buscar calamares desde la orilla o en barco.
Presencia de peces pelágicos
Al final del verano, los distintos peces pelágicos suelen estar a la caza. Bonitou, pelamide el atún, los túnidos o la caballa española pueden pescarse con señuelos a la caza o al curricán.
Recuerde observar el tamaño de los peces forrajeros y adaptar el tamaño y el color de sus señuelos para imitar mejor a estas presas tan codiciadas por los carnívoros.
Aprovecha los vientos del este para rastrear al lobo
Tanto si pesca con señuelos como al surfcasting, a la pelota el otoño es una época muy buena para pescar lobos y encontrar los peces más grandes. Los vendavales de levante comienzan a azotar la costa mediterránea, el fondo está bien removido y hay muchas presas para los merodeadores peces lobo.
Sin embargo, hay que tener cuidado con las olas y el oleaje, que pueden ser peligrosos, sobre todo en las costas rocosas.
En aguas tranquilas, pesca calamares
En esta época del año, los calamares blancos se acercan a las costas para deleite de los pescadores aficionados a la pesca con caña. Ya sea desde la orilla o desde embarcación, es el momento de sacar tus mejores poteras o calamares para enganchar unos cuantos tentáculos.
En barco o kayak, es posible buscar calamares al final del día en profundidades de más de 20 metros. Si está equipado con una sonda de profundidad, busque bolas de peces forrajeros, los bancos de calamares no estarán lejos.
Desde la orilla, hay que favorecer, por supuesto, el amanecer y el atardecer para esperar pescar calamares. En esta época del año, los grandes ejemplares no siempre están presentes. Así que no dudes en utilizar poteras pequeñas, sin olvidar soltar los calamares pequeños para que crezcan.
El otoño es una estación ideal en el Mediterráneo para dar rienda suelta a su pasión.