Dirigirse a una zona rica en alimentos
Las zonas rocosas se cuentan entre los lugares más frecuentados por los pescadores de mar. Antes de dirigirse directamente al punto rocoso más expuesto, tómese su tiempo para analizar la zona. Un buen método es levantar algunas piedras, teniendo cuidado de recolocarlas después con cuidado y ver si hay vida debajo. Busque pequeños cangrejos, gambas y gobios. En general, cualquier cosa que pueda servir de alimento a los peces depredadores que buscas.

Al principio de la temporada, hacia marzo, con el agua fría, habrá pocos alevines, por lo que los depredadores buscarán sobre todo crustáceos. En cuanto el tiempo se calienta un poco, los lanzones y luego las anjovas, como los espadines y las sardinas pequeñas, estarán presentes en la costa. Corresponde al pescador adaptar los señuelos a las presas de los depredadores.

Puntas y calas, 2 bazas seguras
Estas dos áreas son muy diferentes entre sí.
Las puntas corresponden a afloramientos rocosos en el mar que suelen estar expuestos a la corriente. Esta zona, rica en oxígeno, es popular entre los peces depredadores por la presencia de alimento.

El uso de un Shad en una acción de arrastre o lineal a través de la corriente, o un señuelo metálico como el Fiiish Power Tail, son perfectamente adecuados.

Las ensenadas, que algunos llaman pequeñas bahías, son lugares más tranquilos y a menudo resguardados de la corriente. Su forma circular permite a los depredadores atrapar un banco de peces pequeños.

Todo lo que tienen que hacer es alimentarse fácilmente. En este tipo de lugares, cuando las condiciones son tranquilas, suelo pescar con un Black Minnow y una cabeza Search de 18 g, por ejemplo.

Manténgase a salvo
La escalada en roca no está totalmente exenta de riesgos. Una mala caída puede dificultar el regreso. Lleve calzado adecuado, a ser posible con crampones antideslizantes. No lleves demasiadas cosas: una bolsa con unos cuantos señuelos y tu caña será más que suficiente.
