¿Qué hace que un lugar sea mejor que otro?
Puede comprobarlo usted mismo: algunos lugares de pesca son muy productivos, mientras que otros lo son mucho menos, o incluso están completamente desiertos. ¿A qué se debe esta disparidad?
Analicemos por un momento qué es lo que atrae a los peces euro y no euro a una zona.
Casi todos los depredadores actúan de la misma manera. Están presentes en una zona en cuanto ésta les ofrece suficientes recursos alimentarios de forma regular.
Para lograrlo, es esencial la naturaleza del terreno y del sustrato submarinos. Estos elementos deben ser capaces de albergar presas (crustáceos, gambas, gusanos), pero también de proporcionar refugios a los propios depredadores. Los escollos y las algas proporcionan un refugio excelente.

Si no pesco nada, ¿es un mal sitio?
La ausencia de capturas no es en absoluto una prueba definitiva de que una mancha sea mala.
Para hacerse una idea real del potencial de un lugar, hay que pescar en él en diferentes momentos de la marea.
Los peces no siempre están presentes en una zona. La corriente no será la misma con marea alta que con marea baja, por lo que la presencia de peces puede variar.

La estacionalidad también es muy importante. Sé de zonas de pesca que son muy ricas en peces en primavera y luego se vuelven mucho menos ricas al final de la temporada. Varía las veces que pescas en la misma zona para hacerte una idea real.
¿Cómo se localizan las mejores zonas?
He aquí una pregunta que surge a menudo: ¿cómo encontrar una zona adecuada para pescar lubinas, por ejemplo, desde la orilla?
Teniendo en cuenta lo que constituye una buena zona para los depredadores, basta con pasear por la costa con la marea baja y observar el entorno.
A lo largo de la orilla, podrá descubrir lo que acecha bajo el agua cuando pesca. Observa la presencia de algas en las que pueden esconderse los depredadores.
Tómese su tiempo para dar la vuelta a algunas piedras occidentales y ver si hay cangrejos o gambas escondidos. Estas son algunas de las presas favoritas de la lubina.

También puede intentar localizar determinadas zonas mediante imágenes por satélite antes de salir a comprobarlo usted mismo. Este método de observación y localización le ayudará a orientar mejor las zonas donde es probable encontrar lubinas, en particular zonas rocosas, algas, estuarios ricos en alimento y lugares donde la corriente es moderada, lo que favorece la presencia de presas.

Confía en tu instinto
Es sin duda el mejor consejo que puedo darte
A medida que vayas saliendo, adquirirás experiencia e instintivamente te dirás: "¡Aquí huele a pescado!
Debe confiar en su instinto, que mejora constantemente. Su instinto, combinado con una perseverancia inquebrantable, le conducirá sin duda a caladeros prometedores.
Personalmente, trabajo de esta manera: cuando encuentro una zona prometedora que me gusta a primera vista, persevero pescándola en diferentes momentos de la marea, con diferentes coeficientes y, por supuesto, utilizando diferentes técnicas.
Es raro que una zona que reúne todas las características necesarias para albergar depredadores esté completamente desierta y no contenga ni un solo pez.
