Elección de la electrónica de a bordo para la pesca con flotador

La sonda de profundidad, aliada de la pesca vertical

Para optimizar aún más la pesca, es posible equipar su flotador-tubo con electrónica: sonda, batería e incluso motor. Veamos qué equipamiento elegir

¿Pescador convencional o de mano?

Además de las sondas de pesca "clásicas" que se encuentran en los barcos pesqueros, ahora hay sondas de mano con forma de bola, como la Deeper, que se conectan a un teléfono o una tableta para transcribir las detecciones.

La ventaja de estas sondas es que contienen tanto la batería como la sonda y son muy compactas. El inconveniente es que deben conectarse a un teléfono. Esto hace necesario disponer de una batería externa para esta última durante las sesiones largas e invertir en un soporte específico para evitar accidentes. Por otro lado, una sonda de pesca tradicional es más aparatosa y requiere una batería de 12 voltios. Pero son más importantes las tecnologías integradas en el aparato, su autonomía y su duración en el tiempo Una sonda convencional también es más cara de comprar que una sonda portátil y menos polivalente. De hecho, no puede utilizarse para pescar desde la orilla, a diferencia de su competidora.

Ambos tienen sus ventajas y desventajas, por lo que vale la pena sopesar los pros y los contras antes de decidirse a invertir en una sonda de pesca.

¿Qué tecnologías?

Elegir un modelo de sonda de pesca puede resultar complicado para un principiante. Con todas las tecnologías disponibles, es bastante fácil perderse. La detección básica es 2D, que permite ver todo lo que ocurre bajo el tubo flotador, la profundidad, la estructura del fondo, los peces...

Otra tecnología, a menudo como opción adicional, es la DI (down imaging), que también ofrece una vista vertical de lo que ocurre bajo el tubo flotador, pero con una definición mucho mejor y una representación mucho más precisa con sombreado. Esto facilita la interpretación de las 2D. Estas dos vistas son muy complementarias.

Por último, una tecnología muy interesante, sobre todo para la prospección: SI (side imaging), que es una vista lateral con representación en 3D. Esto ofrece un campo de visión mucho más amplio, lo que facilita la búsqueda de rupturas, estructuras e incluso bancos de peces que no estarían bajo el cono de las tecnologías antes mencionadas.

Por último, algunos modelos están equipados con GPS, hablamos de sondas combinadas/GPS. Ofrecen la posibilidad de añadir un mapa o de dibujarlo uno mismo con un software como autochart y, más sencillamente, ¡de marcar un punto cuando se detecta un punto interesante!

¿Qué tamaño de sonda?

En el mercado actual, existen pantallas de sonda de casi todos los tamaños, desde 4 pulgadas hasta más de 20 pulgadas. Sin embargo, en un tubo flotador, como la pantalla se coloca bastante cerca del pescador, no es necesario tener una pantalla grande. No es aconsejable elegir un modelo de más de 7 pulgadas, ya que sería demasiado grande y resultaría molesto durante la pesca

Las pantallas más grandes también consumen más energía, lo que causa problemas con las baterías. El mejor compromiso, y el más utilizado por los pescadores con flotador, es sin duda el tamaño de 5 pulgadas, que permite compartir cómodamente la pantalla entre dos pantallas (cartografía 2D o imágenes 2D-Down, por ejemplo).

¿Qué batería?

En cuanto a la batería, existen dos opciones para el pescador con flotador: la batería de plomo y la batería de litio.

  • Batería de plomo: el primer punto interesante es el precio. Es posible conseguir una por menos de 50 euros. Tendrás que añadir un cargador adecuado. Las conexiones se hacen de forma bastante sencilla con orejetas, y con una de 12ah durará más de un día sin preocupaciones para una sonda de 5 pulgadas Para sesiones largas de varios días y/o para una sonda de 7" un poco glotona, la autonomía puede ser limitada.

  • Batería de litio: Es ventajosa en todos los sentidos. Es mucho más ligera, compacta y rápida de cargar. Su autonomía es muy importante y algunas incluso están equipadas con un enchufe USB adicional, ideal para conectar el teléfono o una cámara de a bordo. El único punto negativo de la batería de litio es su precio. Aunque cada vez son más accesibles con el paso de los años y su democratización, tendrás que pagar entre 10 y 15 veces el precio de una batería de plomo.

El motor en un tubo flotador

Algunos tubos flotadores se ponen a la venta con un soporte opcional para añadir un motor eléctrico, específico del modelo o universal. Práctico pero caro, tanto por el motor en sí como por la batería necesaria para hacerlo funcionar.

El motor de tubo flotador está más bien pensado para pescar en lagos muy grandes o en ríos bastante caudalosos, entornos en los que la navegación con aleta resulta tediosa. Sin embargo, con un motor, ¿no nos estamos alejando demasiado del concepto del flotador-tubo y de su proximidad a la naturaleza?

Cada uno debe juzgarlo, pero debe saber que en el mercado existen varios modelos de flotadores motorizados y motores, y que incluso es posible fabricarse uno propio.

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