En este cuarto día de pesca, mi compañero y yo pescamos principalmente con jerkbaits. Conseguimos que algunos peces grandes se movieran al principio del día, pero una vez más, rechazaron los señuelos y no picaron.
Sin embargo, las mariposas son muy cooperativas esta mañana, y los golpes están llegando. Esta especie es muy combativa y más abundante que las tememsis, perfecta para divertirse a la espera de que aparezcan las grandes.

Doble golpe
Al final del día, llegamos a una laguna con una entrada muy pequeña. Mi compañero hace reaccionar a un macho muy grande, que debe haber estado vigilando la entrada de esta laguna. Entramos en la laguna y, unos instantes después, nuestro guía divisa un grupo de pequeños pavones, lo que significa que, sin duda, un progenitor no está lejos.
De hecho, como ya se explicó en un artículo anterior, los grandes pavos reales tienen un instinto maternal muy fuerte, pero también un instinto conyugal, ya que permanecen en parejas. Este comportamiento protector les lleva a ahuyentar a los intrusos, incluidos otros pavones. Por lo tanto, se puede considerar que sólo hay una pareja ocupando cada laguna, excepto en las lagunas muy grandes que pueden albergar varias parejas. Por lo tanto, puede ser una buena idea, cuando se captura un gran pavón, que el segundo pescador continúe pescando, ya que lo más probable es que la otra pareja se encuentre en la zona.
Tras esta observación, mi compañero se toma la molestia de cambiar de caña para lanzar un jig de cola de ciervo. La reacción fue inmediata y se enganchó a un bonito ejemplar.

Dominar el combate
Los grandes pavones comienzan su lucha con una gran acometida de 10 a 20 metros, entonces es posible traerlos de vuelta al barco de una sola vez. A partir de aquí, los peces realizarán otras acometidas potentes pero no largas, de unos 2 a 5 metros. Por lo tanto, la lucha es corta, pero muy intensa y propensa a las paradas, debido a las aceleraciones bruscas.
Tienes que ser capaz de equilibrar entre atraer al pez, darle cierta libertad para que no se estanque y, sobre todo, evitar que salte fuera del agua. Cuando notes que el pez sube a la superficie, debes aflojar la presión sobre él para que no salte. Si el pez salta, deja de tirar y baja la caña hacia él, lo que da holgura al sedal y aumenta la probabilidad de que el anzuelo permanezca pinchado, cuando el pez sacuda la cabeza.

Para capturar el pez, se puede coger por la boca, como en el caso del black bass, o utilizar una pinza tipo Bogagrip. En ambos casos, hay que sostener el peso del pez con la otra mano.
Balance de la jornada
Por mi parte, mi jornada se resumió en la captura de una buena cantidad de pavones mariposa. En cuanto a mi compañero, consiguió pescar un gran pavón al final del día.