Bajo las faldas... de la microjiga
Bien conocido por los competidores de streetfishing y pesca de orilla, el micro jig es extremadamente eficaz con una amplia gama de peces. Pero, ¿cómo sacar el máximo partido a esta cabeza de jig con faldón tan técnica? ¿Cómo se anima? ¿Cuáles son los distintos tipos de modelos y especies objetivo? Aquí tienes algunas respuestas que te ayudarán a sacar el máximo partido a este señuelo y a causar un verdadero impacto
¿Qué es una micro plantilla?
En primer lugar, creo que es una buena idea repasar la "anatomía" de un microjig.
En inglés, "jig" significa saltar o bailar. El nombre "jig" se da a dos tipos de señuelos muy diferentes: el "jig de metal" que conocen los pescadores de caña en el mar y el "jig de goma" que nos interesa.
Se trata de un jighead provisto de un faldón de silicona o caucho. A lo largo de este artículo, cuando mencione el término "potera", me referiré a esta última.
"Físicamente, la forma de un jig se resume en una cabeza de plomo a la que se ha fijado un faldón de fibras de silicona de grosor variable. Los primeros jigs diseñados para acechar al black bass eran imitaciones bastante abstractas y figurativas de cangrejos de río, con un peso de entre 7 y 28 gramos (1/4 a 1 oz). Un micro jig, en cambio, pesa menos de 5 gramos, de ahí el nombre de "micro" jig.

Los clásicos micro jigs de 1,8 y 2,5 gramos cubren una amplia gama de situaciones. El tamaño del anzuelo oscila entre n°6 y n°0/1, adecuado para percas y cacho y el uso de remolques de 5 cm.
El principal punto fuerte del microjig es que se trata de un señuelo deslizante cuya falda está en constante movimiento, incluso durante animaciones minimalistas. Esto da una fuerte impresión de vida. Durante los tirones, la falda se cierra, imitando la contracción de la presa y dando un impulso para moverse, cuando está en contacto con el fondo, la falda se abre dando volumen. El faldón añade un valor real al potenciar el atractivo del tráiler con contrastes, ondulaciones, volumen y finas señales vibratorias.
Estas ventajas hacen que el micro jig sea ideal para su uso en condiciones difíciles y con peces educados.
Algunos microjigs tienen un dispositivo antihierbas, un anzuelo Texas o "guard". El protector está formado por una o varias fibras bastante rígidas que protegen la punta del anzuelo de los obstáculos hasta cierto límite. Cuando sólo hay una fibra, se denomina antihierba. Cuando la guarda es más rígida, evita que demasiados anzuelos se enganchen en ramas y obstáculos. Por otro lado, el anzuelo debe ser firme para penetrar correctamente en la boca del pez y éste debe llevarse el señuelo firmemente a la boca.
Además de por su peso, los micro jigs se diferencian de sus hermanos mayores en que sus cabezas están hechas de tungsteno en lugar de plomo. La mayoría de las pastillas modernas para jigs tienen una cabeza de tungsteno. Este material poco contaminante también es muy relevante por sus propiedades de resonancia, que lo hacen más perceptible en la caña, sobre todo en contacto con el fondo.
Además, este material más denso que el plomo ofrece una cabeza compacta para un descenso preciso del señuelo y menos resistencia en el agua y las corrientes, dejando que la falda trabaje de forma óptima.
Adaptarse al pez que se busca
El micro jig, tal y como lo conocemos, se creó originalmente en Japón para la pesca fina y ligera del black bass educado. Digo "tal y como la conocemos", porque el término micro jig procede de Estados Unidos y designa también a los pequeños jigs de marabú, jigs cuya falda no es de silicona, sino de plumas de marabú.
Pero volvamos al tema que nos ocupa. El micro jig, este señuelo técnico, se utiliza cuando se pesca con pequeños señuelos naturales, como parte de la filosofía del "downsizing". Es decir, el uso de señuelos discretos, naturales y sutiles para engañar a los depredadores desconfiados que se resisten a los señuelos demasiado grandes o que emiten demasiados estímulos.
Sin embargo, en Europa, el microjig es un auténtico imán para la perca. De ahí su uso habitual en competiciones de pesca en la calle y en la orilla.
Este señuelo selecciona percas de malla y percas grandes difíciles en particular. Pero eso no es todo. El micro jig es uno de los pocos señuelos con los que puedes pescar absolutamente cualquier pez
Esta otra característica también justifica su uso generalizado en las competiciones de pesca de orilla.
También son muy receptivos el cacho, el barbo, el lucio, el black bass, la lucioperca, el siluro pequeño, la trucha e incluso el pescado blanco.
En cuanto a las animaciones, tendrás que adaptarlas a los peces que persigas. La presentación es importante, pero el punto fuerte del microjig es que es un señuelo que no imita nada, pero sobre todo todo todo, en función de cómo combines colores, remolques y animaciones.
Según el color, el peso y el remolque utilizado, puede imitar a un pez, un invertebrado acuático o incluso restos vegetales...
Esta es una de las razones por las que es tan eficaz con tantas especies
Para la perca, hay que estar lo más cerca posible del fondo. Las percas grandes suelen coger el señuelo cuando está parado, cuando está pegado al sustrato. Tirar del señuelo rascando el fondo o dar pequeños saltos levantando el sedimento resulta muy atractivo. Los cangrejos de río son un manjar que encanta a las percas, por lo que el micro jig es una auténtica delicia para ellas.
El cacho prefiere un señuelo que se mueva suavemente justo por encima del fondo. El señuelo debe ir a la deriva sin entrar necesariamente en contacto con el fondo. La picada suele ser silenciosa y hay que golpear con energía. En este caso, imita a un invertebrado a la deriva o a un pez que se desliza por la corriente.
Los lucios no se quedan atrás y hacen poco con este pequeño señuelo. Para el lucio, tendrás que mantener el señuelo en contacto con la acción. A menudo, cuando el señuelo está planeando, se produce una picada en la bajada, y hay que responder rápidamente con un golpe fuerte para evitar que se corte, aunque un bajo de línea inadecuado cortará el 90% de las veces... Son preferibles los modelos deslizantes con un faldón denso y los colores blanco, chartreuse o rosa son muy atractivos para los lucios. Si los lucios se centran en señuelos pequeños o si hay muchos en el lugar de pesca, te aconsejo que utilices un bajo de línea de titanio, flexible y discreto, que resistirá mejor los dientes de los lucios que un bajo de línea fino de fluorocarbono.

Para el barbo, deje que el señuelo derive, permitiendo que se asiente en el fondo. Alterne la tensión de la línea y el streamer semi-tensado para dejar que el señuelo recoja sucesivamente la corriente y entre en contacto con el fondo. El barbo se moverá entonces para agarrar esta presa fácil con el andar natural y la natación fluida de un pequeño invertebrado a la deriva con la corriente.
Por último, para el black-bass, sobre todo para los peces muy educados, el micro jig sigue siendo muy eficaz. El micro jig es una presa natural y discreta, y el black bass parece perder su desconfianza ante esta sabrosa golosina. El micro jig puede utilizarse hábilmente para pescar a pez visto o para explorar zonas poco profundas.
En términos más generales, la pesca con microjigging es una forma lenta de "rascar" y controlar las derivas. Hay que centrarse en puntos y remolinos marcados y ofrecer una presa realista y de movimientos lentos para engañar incluso a los depredadores más recelosos. Por último, aunque este señuelo es ligero y de pequeño tamaño, no por ello dejará de capturar peces bonitos.
Importancia del remolque
Como ya hemos dicho, el micro jig es capaz de imitar a cualquier presa pequeña. Más que una cabeza de plomo con faldón, el micro jig aporta volumen, vibración, un efecto visual realista, un nado deslizante... y va de la mano de un remolque, literalmente "seguidor" o "reptador"...
El remolque es el nombre que recibe el señuelo blando montado en el anzuelo del micro jig. Puedes utilizar casi cualquier tipo de señuelo, en función de la presa que quieras imitar, el pez que persigas, la acción natatoria que desees, la velocidad de descenso... Cangrejo de río, sábalo, finesse, gusano, coma...
Además del tipo de señuelo utilizado, también puedes jugar con su tamaño, volumen y color. Cuanto más grande sea el señuelo y más apéndices vibratorios tenga, más agarre tendrá en el agua y más fácil será su deslizamiento.
A veces tendrás que utilizar un señuelo que contraste con el micro jig para dar más color al pez o, por el contrario, ser muy imitativo y utilizar un micro jig más remolque de color similar. En cuanto a los colores, he aquí algunas reglas no exhaustivas: naranja, negro, marrón cola para simular un cangrejo de río, verde, arena, gris para dar la ilusión de un invertebrado acuático, blanco, purpurina brillante, gris plata para imitar a un pez pequeño y, por último, colores llamativos, blanco, rosa, chartreuse para aguas tintadas, para lucios o luciopercas...
Límites de la micro plantilla
El micro jig es un arma formidable, imprescindible para los pescadores de caña fina que quieren atraer a un gran número de percas y cacho desconfiados. Por otro lado, el micro jig tiene sus límites. Su acción deslizante se convierte en una desventaja cuando se lanza lejos. Las fibras ofrecen un agarre importante en el aire y ralentizan el señuelo al lanzarlo. Es difícil lanzar lejos con este señuelo ligero.
Una vez más, debido a las fibras y a su acción deslizante, será difícil pescar a gran profundidad o en corrientes fuertes. De hecho, el señuelo nadará demasiado alto en el agua debido a que las fibras quedan atrapadas en el agua y será muy difícil trabajarlo y hacerlo nadar limpiamente. El micro jig es más eficaz cuando está cerca del fondo.

Otra desventaja, que es una desventaja a pesar de todo, es que el micro jig es extremadamente eficaz con lucios de 50 a 80 cm... Sin un bajo de línea adecuado, ¡casi siempre tendrás que cortar el sedal!
Caña y carrete
Para adaptarse a este estilo de pesca fino y táctil, necesita una caña que sea a la vez sensible y receptiva, capaz de dar el impulso necesario para impulsar su microjig a la distancia adecuada y sentir cómo se desplaza perfectamente por el fondo.
Las cañas de punta sólida ofrecen mayor sensibilidad y control, sobre todo en animaciones minimalistas. El rango de potencia debe corresponderse con el peso del micro jig utilizado. Suele oscilar entre 1 y 7 gramos. La gama Illex Pepper, que no necesita presentación, cuenta con numerosos modelos adaptados a la pesca con micro jigs, como la Pepper S205UL Micro Jig Special.
El carrete debe estar equipado con trenza. El trenzado ofrece mejores prestaciones de lanzado y máxima sensibilidad. Recuerda que la pesca con un micro jig es precisa y táctil, y que necesitas dominar la acción natatoria del jig y su altura con respecto al fondo para ser eficaz.
Para que el carrete esté perfectamente lleno de trenza fina (4 a 8/100) PE0,3 a PE0,6 debe ser pequeño (1000 a 2500) con un carrete poco profundo si es posible. Esto permite tener un carrete perfectamente lleno, lo que es necesario para lanzar con facilidad, sin utilizar demasiada trenza fina. A menudo utilizo ratios bastante lentos o intermedios, para controlar fácilmente el streamer y ser más preciso y fluido en las animaciones.
Micro plantilla para una gran satisfacción
El micro jig es un señuelo de finura clásico para los pescadores de calle. Capaz de atraer a todas las especies y peces difíciles, el micro jig es un señuelo técnico y sutil que hay que dominar. Su acción deslizante requiere atención y concentración, y el combo caña-carrete debe adaptarse para sacar partido de esta pequeña cabeza rellena de fibra...