Permisos, el Grial de los pisos
Permiso, trachinotus falcatus es un pez de forma ovalada de la familia de los jureles con aletas oscuras y puntiagudas muy desarrolladas (caudal y dorsal) que se alimenta principalmente de cangrejos y gambas en aguas profundas.
Puede vivir unos veinte años y pesa entre 5 y 10 kg de media, pero puede llegar a pesar más de 20 kg en determinados destinos. El récord mundial es de 60 libras (casi 30 kg).
Una subespecie, la palometa del Indopacífico, vive en el océano Índico y se encuentra principalmente en las Seychelles y el noroeste de Australia. Suele ser de menor tamaño y color amarillento, debido al entorno en el que vive. Sin embargo, adopta el mismo comportamiento que su prima atlántica, alimentándose de cangrejos y gambas en arrecifes de coral, bajos o en las lagunas de las Seychelles, donde vuelven para alimentarse.

Permisos de pesca
La palometa vive principalmente en profundidad, entre 10 y 50 metros, pero viene a buscar su alimento en los bajos, bordes y bajos, que son más profundos que el macabí.
Se puede pescar tanto desde embarcación, lo que permite cubrir mucho terreno, sobre todo para los peces que se mueven rápidamente (crucero), como con guata para acercarse a los peces que se alimentan activamente.
Generalmente utilizamos una caña de mar de acción rápida de 9 pies con una potencia de 9 o 10 dependiendo de las condiciones, equipada con una línea flotante descentrada tipo Rio Permit (WF) prolongada por un bajo de línea largo que termina en una punta de fluorocarbono de 16 a 25/30 lb o más (tippet Rio Permit para agua salada).
Es un pez muy potente y no se puede pescar con líneas demasiado gruesas como otras especies de jureles, que se alimentan cazando en bancos de peces pequeños y son menos observadores y mucho más agresivos. Es una aproximación mucho más fina debido a su legendaria desconfianza y a la dificultad de conseguir que se interesen con nuestras moscas. Gracias a su gran ojo, debe de tener muy buena visión, lo que le permite detectar la más mínima anomalía. Pero nadie lo sabe realmente.
Por este motivo, es muy frecuente recibir rechazos, incluso si has presentado bien tu mosca, que la mayoría de las veces imita un cangrejo o una gamba montada en anzuelos de mar de tamaño 2, 1 o incluso mayor. El tostado y el oliva son los colores más utilizados para la palometa atlántica, mientras que el blanco parece ser el color dominante para la indopacífica.

Su pesca consiste en prospectar largos bajos en busca de peces errantes en pequeños grupos, y de peces aislados, a menudo de mayor tamaño. O bien nadan rápidamente, en cuyo caso hay que interceptar su trayectoria lanzando bien aguas arriba (varios metros) del movimiento de los peces y delante del pez líder (el que encabeza la tropa), o bien se alimentan más activamente en el fondo, mostrando sus aletas caudal y a veces dorsal (cola). En este caso, hay que lanzar mucho más cerca, con precisión y delicadeza, para introducir la imitación en su campo de visión, limitado por el hecho de que se concentra en las presas del fondo.
Son acciones muy diferentes y el comportamiento del pez y su velocidad de movimiento, así como la profundidad del lugar, dictarán lo que el pescador debe hacer para aumentar sus posibilidades de éxito.
La acción es magnífica, ya que ver a estas palometas alimentándose con la cabeza inclinada hacia abajo y la cola en el aire es siempre un gran momento. Sin embargo, cuando una palometa está a tiro de lance y mueve la cola fuera del agua con regularidad, el pescador tiene que ser preciso y rápido. Lanzar nunca es fácil, porque suele hacer viento, los peces se mueven constantemente y son muy cautelosos. El pescador tiene que mantener la calma y concentrarse para hacer un lance perfecto, de lo contrario el pez se ahuyentará.
La lucha con una palometa es muy violenta y musculosa, igual que las potentes y rápidas jacas. Su resistencia es asombrosa. Un pez de 5 kg puede darte de 50 a 100 m de lomo de una sola vez, ¡así que puedes imaginarte los ejemplares más grandes!

Los mejores destinos para pescar palometa
La palometa puede capturarse en muchos destinos del Caribe, donde encuentra su hábitat preferido en los bajos de fango arenoso, los arrecifes de coral y la hierba de las tortugas, donde busca alimento.
México es sin duda uno de los mejores destinos, donde durante la semana se puede encontrar un gran número de peces de todos los tamaños, ya sea en la Bahía de la Asunción, Espíritu Santo o Chetumal. Le sigue Belice, que limita con el sur de México y tiene hábitats y poblaciones similares.
Cuba tiene muchas zonas clasificadas como reservas marinas, donde la pesca está autorizada pero regulada y controlada, y varios destinos son excelentes para la pesca con palometa, como Cayo Cruz y Cayo Largo. Se puede encontrar prácticamente en cualquier lugar de este destino.
Destinos famosos para los permisos atlánticos :
- Belice
- México
- Florida
- Cuba
Principales destinos para permisos en el Indo-Pacífico :
- Seychelles (Farquhar, Cosmolédo, Alphonse Islande)
- Exmouth, en Australia.