Retención de peces
Las mejores zonas del río para buscar las codiciadas especies en el Orinoco son las menos profundas, donde la corriente se acelera. El enfoque que tuve con el Orinoco me recuerda a la pesca en el Loira. Es una pesca muy visual, en la que hay que saber leer la superficie del agua, adivinar lo que se esconde debajo y el comportamiento de los peces que se deriva de ello.

Las sardinatas permanecen muy cerca de la superficie, su actividad puede observarse en la superficie cuando están presentes. En cambio, las payaras no permanecen sistemáticamente en la superficie. Pueden permanecer allí para cazar o para oxigenarse, de lo contrario permanecen a mayor profundidad para descansar. Un buen indicador para saber si una zona es adecuada para capturar payaras es la presencia de pirañas, ya que ambas aprecian los mismos entornos.

Flujo total
En las zonas poco profundas, sometidas a la corriente más fuerte, los señuelos jerkbait minnow, sinking stick y blade son los que mejor funcionan. Permiten pescar en estas zonas sin que les afecte la corriente.
Amortización y contracorriente
Si la corriente es menos fuerte, en las zonas cebadas y más profundas, los longbill minnow, swimbaits, cucharillas y, sobre todo, los señuelos blandos montados en cabezas de plomo permiten explorar las distintas alturas del agua. En cuanto a los señuelos blandos, son muy eficaces con las payaras, pero son vulnerables a los dientes de las payaras y las pirañas, por lo que hay que tener una gran reserva

Antecedentes
En cuanto a la naturaleza del fondo en los lugares donde paramos, hay dos tipos. Fondos arenosos, que no me dieron ningún resultado, y fondos rocosos, donde encontré la pesca mucho mejor.
Este día, rico en lecciones, llega a su fin y regreso a la localidad de Puerto Carreño.

Conoceré al grupo de pescadores con los que pasaré el resto de mi estancia.