Presentación de la gallineta nórdica
Su nombre científico es Helicolenus dactylopterus, y la gallineta nórdica recuerda inmediatamente a un pez escorpión. Miembro de la familia de los peces escorpión, la gallineta nórdica tiene el cuerpo bastante comprimido y cubierto de escamas. Su color es predominantemente naranja rojizo, con un tinte rosado en el vientre. Tiene dos grandes ojos globulares situados hacia la parte superior de la cabeza para ver mejor a las presas o depredadores que se mueven por el fondo.

El pez cabra, cabracho, cardo o gallineta nórdica son pequeños peces de aguas profundas. El tamaño medio de una gallineta es de unos veinte centímetros, aunque puede encontrar algunas de más de 40 centímetros.
En los fondos principales
La gallineta nórdica es un pez bentónico que puede encontrarse a profundidades de entre 50 y más de 500 metros. Les gustan los fondos rocosos, pero también pueden encontrarse cerca de fondos arenosos y fangosos. A las gallineta nórdica les gusta vivir en bancos y no es raro duplicar las capturas.
La pesca de gallineta nórdica
La gallineta nórdica puede pescarse verticalmente en fondos de entre 50 y 200 metros, puede pescarse a mayor profundidad, pero para ello se necesita un equipo especial, como un carrete eléctrico.

La gallineta nórdica puede pescarse con señuelos como slow-jigs, pero es más común pescarla con cebos como maddai-jigs. Los mejores cebos son trozos de sardina o caballa, y tiras de calamar.
Los aparejos y los bajos de línea utilizados para la pesca de la gallineta nórdica deberán ser capaces de soportar batallas más duras de lo esperado, ya que al pescar a tanta profundidad no es raro encontrarse con otras especies de peces mucho más grandes y combativas.
Además, la elección del carrete es importante, ya que deberá contener cerca de 200 metros de trenza y, al mismo tiempo, tener un ratio elevado para limitar los esfuerzos en la subida. Un punto importante que no hay que descuidar si se quiere pescar gallineta nórdica durante toda una sesión.