Las crecidas son un momento muy especial en la vida de un río y, por tanto, en el enfoque que los pescadores deben adoptar para atraer a la lucioperca. Los cambios en el entorno influyen directamente no solo en el comportamiento de sus habitantes, sino también en la percepción y ubicación de nuestros señuelos.
Durante una crecida, la turbidez del agua varía mucho y a veces reduce la visibilidad a unos pocos centímetros. Para hacer frente a este problema, hay que facilitar la percepción y localización del señuelo utilizando modelos que ofrezcan vibraciones relativamente fuertes, un color que contraste con el entorno y una animación principalmente lenta.
Teniendo esto en cuenta, también soy partidario de utilizar señuelos bastante "sustanciosos", sobre todo porque las presas que se buscan a finales de otoño y en invierno suelen ser bastante grandes.

Señuelos llamativos de 6-7 pulgadas
Así que, cuando el agua está alta, mi selección de señuelos se basa principalmente en sábalos o gusanos de 15 ó 20 cm de color blanco, naranja, rosa, amarillo o negro.
Mi selección de sábalos
Mi caja estará llena de sábalos Sawamura One Up en 15 y 20 cm y Keitech Fat shad impact en 20 cm para las vibraciones más finas y la pesca más lenta. Para vibraciones más fuertes y una acción más rápida o "tónica", confío en el eterno sábalo Delalande GT y en el sábalo Berkley Pulse de 14 cm. Para vibraciones intermedias, me gusta especialmente el Shaker de 15 cm de Lunker City.
Mi selección de Grubs
Para ofrecer otras vibraciones, lo que a veces es decisivo, opto por larvas de entre 15 y 20 cm. O bien son larvas clásicas, o bien opto por las famosas Sandra de Delalande.

Tracción, pesca lineal y por arañazos
En función del estado de actividad de la lucioperca, es necesario variar las animaciones.
Hay 3 escenarios posibles:
- Lucioperca a la caza en este caso, prefiero pescar con los señuelos que producen las vibraciones más fuertes. Basta con dejar que el señuelo se hunda hasta el fondo, darle un tirón de unos 40-50 cm y volver a dejarlo caer, manteniendo el sedal tenso y utilizando la punta de la caña para guiarlo.
- La lucioperca está activa entonces opto por una recogida lineal en el carrete, manteniéndome lo más cerca posible del fondo y haciendo algunas pausas a intervalos regulares. Sólo queda encontrar la velocidad y la vibración adecuadas.
- Las luciopercas descansan : En este último caso, pesco rascando muy despacio y haciendo largas pausas en el fondo.

La importancia del gramaje
En toda pesca con señuelos blandos, el peso es un factor determinante. Durante los periodos de aguas altas, el problema sigue siendo el mismo: hay que encontrar el mejor compromiso para pescar con ligereza y naturalidad permaneciendo cerca del fondo. En la pesca con sedal, el peso estará estrechamente ligado a la velocidad de recogida.

Algunos subterfugios más
Para aumentar tus posibilidades de capturar un pez, puedes utilizar atrayentes en tus señuelos o añadir un triple ladrón si las picadas son especialmente sutiles debido a una falta de actividad o a un parámetro no resuelto (tamaño, color, peso del señuelo). Las palas y los sonajeros también son accesorios que a veces pueden desencadenar algunas picadas suplementarias.