Historia y arquitectura
Este magnífico canal se construyó en el siglo XVII bajo la dirección de Pierre-Paul Riquet, un ingeniero visionario. Su ambición era crear un paso navegable entre el Mar Mediterráneo y el Océano Atlántico, evitando los largos desvíos a través del Estrecho de Gibraltar. La construcción comenzó en 1666 y finalizó en 1681, lo que representó una proeza técnica notable para la época.
Las obras movilizaron a miles de trabajadores y exigieron el uso de tecnologías innovadoras para superar los retos geográficos. La construcción de las esclusas y de los puentes acueducto permitió salvar los desniveles y mantener un flujo constante de agua, indispensable para la navegación. El Canal du Midi se convirtió así en uno de los proyectos de ingeniería más ambiciosos de su época.
Patrimonio arquitectónico
Durante su visita, verá algunas estructuras arquitectónicas notables que dan testimonio de su rico pasado. Las esclusas, en particular, son obras de arte en sí mismas. Construidas en piedra, regulan el nivel del agua y facilitan el paso de los barcos de un tramo a otro del canal. Entre las esclusas más famosas se encuentran las de Fonserannes, un grupo de nueve esclusas sucesivas que ofrecen una vista impresionante de la región.
Los puentes y acueductos son también maravillas arquitectónicas. El puente del canal de Béziers permite que el canal cruce el río Orb, ofreciendo unas vistas espectaculares de la ciudad. Estas estructuras no sólo son funcionales, sino que también añaden una dimensión estética al viaje, haciendo que cada parada sea memorable.
Actividades fluviales

La pesca en el Canal du Midi ofrece una experiencia enriquecedora y variada a los amantes de este pasatiempo. Este canal histórico, de aguas tranquilas y orillas sombreadas, es el lugar ideal para practicar diferentes técnicas de pesca. Entre las especies más comunes figuran la carpa, el lucio, la lucioperca y el siluro, que atraen a numerosos pescadores. La pesca submarina es especialmente popular, y muchos peces se pescan desde las orillas. También se practica la pesca con mosca y con señuelos, que ofrece emocionantes desafíos a los pescadores experimentados. Además de la diversidad de peces, el tranquilo entorno y la belleza natural del Canal du Midi hacen que cada salida de pesca sea memorable. Tanto si se trata de un relajante día en familia como de una competición entre amigos, este deporte promete momentos inolvidables y capturas impresionantes.
Para los aficionados a la vela, alquiler de barcos en el Canal du Midi es una excelente opción, ya que ofrece total libertad de movimientos y la posibilidad de detenerse donde se desee. Otra actividad para disfrutar aún más del viaje es el alquiler de bicicletas, que permite pedalear por los caminos de sirga cercanos al agua, ofreciendo una perspectiva diferente del paisaje y facilitando las paradas para admirar las vistas o visitar lugares de interés.
Los viñedos también ofrecen oportunidades para degustar los vinos locales, una actividad maravillosa para los amantes del vino. Los cruceristas pueden parar en las bodegas para descubrir las variedades de uva locales y degustar vinos de fama mundial, al tiempo que aprenden sobre los métodos de elaboración y la historia de la región.
Paisajes y experiencias de crucero

Podrá descubrir numerosas ciudades y pueblos pintorescos con atractivos únicos, ya que hay muchas paradas a lo largo del Canal du Midi. En Carcasona, los visitantes pueden explorar la famosa ciudad medieval, con sus imponentes murallas y calles adoquinadas. En Castelnaudary, la parada es obligada para degustar el famoso cassoulet, plato tradicional de la región.
Navegar por estas aguas significa atravesar una diversidad de paisajes que cautivan la vista a cada paso. El canal serpentea entre verdes viñedos, densos bosques y llanuras abiertas, ofreciendo una visión de la rica biodiversidad de la región. Las orillas están a menudo bordeadas de plátanos centenarios, cuyas ramas forman un dosel natural sobre el agua, creando un ambiente tranquilo y sombreado ideal para la navegación.
Los cruceros también ofrecen la oportunidad de observar una gran variedad de fauna. Las aves acuáticas, como garzas y martines pescadores, son compañeros frecuentes de los viajeros, mientras que peces y anfibios pueblan las aguas del canal. Esta riqueza ecológica añade una dimensión extra a la experiencia del crucero, haciéndola tan educativa como relajante.