1) Hacerlo seguro
Los alicates y las tijeras de pesca son herramientas que se pierden con frecuencia. Pueden caerse del bolsillo u olvidarse en la orilla después de haberlas utilizado. La mejor forma de evitar perder los alicates es atarlos a uno mismo o a la embarcación. Existen cuerdas en espiral extensibles, también conocidas como correas, que se pueden utilizar para atar los alicates a un punto fijo.
Para completar este accesorio, una funda que se lleva en el cinturón es la mejor manera de mantener los alicates seguros y al alcance de la mano cuando se pesca desde una embarcación o desde la orilla.
2) Protegerlo de la oxidación
Los alicates metálicos tienen un enemigo común: el óxido. El óxido es mucho más problemático si los alicates se utilizan en agua salada, pero incluso en agua dulce, hay algunas reglas a seguir para prolongar su vida útil.
Desde el principio, y con regularidad, hay que enjuagar y lubricar las tenazas, sobre todo alrededor de la articulación. Utiliza un lubricante que deje una película aceitosa y actúe como barrera contra el agua.
Si empieza a aparecer óxido, frotarlo con un cepillo de alambre suave y el mismo producto utilizado para lubricarlo debería eliminarlo.
Si no se desprende y está demasiado incrustado, entonces se debe utilizar un producto más fuerte, como un quitóxido. Sin embargo, este tipo de producto puede alterar el tratamiento superficial de las tenazas, haciéndolas más susceptibles a la corrosión posteriormente.
Por eso es tan importante tomar medidas desde el principio, antes de que el óxido sea demasiado profundo. Unas tenazas con un mantenimiento regular pueden durar décadas.
Otro factor es la calidad de la aleación utilizada, que será más o menos sensible a la oxidación en función de su composición. Para los alicates de pesca, el acero inoxidable es la mejor elección.
3) Utilícelo correctamente
Los alicates deben utilizarse para el fin previsto y no deben sobrepasar el uso recomendado.
No hay que forzarlo, ni hacerlo girar bruscamente sobre sí mismo, lo que hace que el pivote trabaje y cree holguras en él.
4) Limpieza
Por último, el buen funcionamiento de una pinza depende sobre todo de su limpieza.
Debe mantener limpias las tenazas y eliminar cualquier impureza, como la arena, que pueda adherirse a ellas.
Un par de alicates se compone de piezas móviles, y cuando la arena o la suciedad se atascan en el pivote, el ajuste de sus piezas puede resultar muy costoso y se pueden producir holguras. Un par de alicates puede limpiarse correctamente con aire comprimido o un cepillo suave.
