La historia de estas pelÃculas comenzó en 2012 en el foro de Montluçon, donde conocimos a Frank (Frank PIZON, el director). Ese dÃa, me habÃa presentado el guión de un mediometraje que estaba decidido a realizar. Tras leer la sinopsis, me di cuenta de que Frank no sólo había transcrito parte de su propia historia como pescador, sino también, sin saberlo, parte de la mía. Había puesto por escrito todo lo que él sentía, todo lo que yo sentíaâ?¦ Nuestra historia se hizo común.
A partir de este encuentro, Frank realizó la película en dos partes "A Voice Over the Reeds". La primera parte cuenta la historia de un pescador que regresa al lugar de su infancia. La segunda parte se centra en la adolescencia del pescador. Esta película es un pensamiento para nuestros respectivos abuelos, que murieron demasiado pronto y nos transmitieron el virus de nuestra pasión.
Una voz por encima de los juncos
Con el tiempo, sólo quedan los recuerdos. Una cita de Lois Lowry dice: "Lo peor de guardar los recuerdos no es el dolor. Es la soledad en la que te encuentras. Los recuerdos están para compartirlos. Nuestros recuerdos comunes podrán compartirse ahora gracias a "Una voz sobre las cañas".
Este intercambio se hizo incluso en toda Europa del Este, al emitirse en un gran canal temático "Caza y Pesca" en cuatro países: Hungría, República Checa, Eslovenia y Rumanía. ¡Fue una gran aventura ver sus imágenes salir al extranjero! Con la realización de esta pelÃcula, sentimos un cierto apaciguamiento, un cierto alivioâ?¦ ¡Se rindió un primer homenaje a nuestros abuelos y este homenaje no se limitó a Francia!
Primera parte:
Segunda parte:
Una última obra bajo el signo de la transmisión
Pero la historia no acabó ahí Frank y yo queríamos expresar en una última película el intercambio y la transmisión que nos habían convertido en los pescadores y las personas que somos. Por esta razón, la historia de la película "Les enfants du bord de l'eau" debía construirse en torno al hecho de compartir la pasión por la pesca entre un padre y su hijo. A través de imágenes de las cosas sencillas de la vida junto al agua, había que traer de otra manera los recuerdos de la infancia.
En resumen, queríamos honrar lo que muchos habían experimentado. Nuestra pasión es en cierto modo una escuela de la vida, una escuela de la naturaleza donde compartir y transmitir son los vectores esenciales. Este compartir y transmitir, que se pone de relieve en la película, mantiene el recuerdo de nuestras primeras salidas de pesca y nos permite prolongar el vínculo con nuestros mayores. En concreto, es una forma de mantener vivo lo que nos enseñaron.
Sinopsis
Es la historia de una transmisión de generación en generación, la de la pasión por la pesca. En el corazón de Francia, un padre y su hijo perpetúan esta tradición a orillas del agua con el mismo espíritu de compartir. Todas las pequeñas cosas que hacen grande la vida a orillas de un río o de un estanque son para ellos una oportunidad de vivir con complicidad la fuerza del momento.
Un público afectado
Aunque este medio hace honor a lo que hemos vivido y representa una pequeña parte de nuestra historia, devuelve a muchas personas a una pequeña parte de sà mismas. Hemos recibido muchos mensajes que expresan este regreso a la infancia con palabras fuertes como "escalofrÃos", "lágrimas", "emociones", "amor"... Estos mensajes nos han conmovido profundamente, sobre todo porque nunca es fácil expresar lo que sentimos. GRACIAS por todo esto.
La vida internacional de la película
La película "Children of the Waterfront" se estrenó a principios de 2016 como preestreno en los Países Bajos en el Zwolle Carp Show como parte del ECFFT (European Carp Fishing Film Tour) organizado por Carpzilla.
A continuación, la película se proyectó en una veintena de cines alemanes y austriacos (Múnich, Fráncfort, Berlín,âeuros¦). Para el evento, la película fue especialmente traducida y doblada a la lengua de Goethe.
Muchas gracias a Mark Dörner, de Carpzilla, por confiar en nosotros, pero también a su sobrino nieto Max, que dobló nuestra película con gran habilidad en el estudio de grabación de Alemania. Sabemos por los comentarios de Mark que la película fue muy bien recibida en los cines de todo el Rin.
¿Y en Francia?
En Francia, la película contó con el apoyo del Groupement National Carpe. Se estrenó oficialmente durante el 14º Foro Internacional de la Carpa y el Siluro, celebrado en Montluçon. Fernand De Castro, Presidente del GN Carpe, y los miembros de su equipo quisieron (¡y se lo agradecemos sinceramente!) apoyar la película y los mensajes que transmite.
Desde este estreno en Francia, la película está disponible gratuitamente en Vimeo (véase la lista completa de películas al final del artículo).
Por la Liga contra el Cáncer
la película "Les enfants du bord de l'eau" y la totalidad de "Une voix au-dessus des roseaux" se editaron en DVD. Todos los beneficios se donaron a la Liga contra el Cáncer. Frank y yo estábamos absolutamente decididos a llevar este proyecto hasta el final: mostrar nuestra pasión, transcribir lo que sentíamos, rendir homenaje a nuestros respectivos abuelos y participar en la lucha contra esta sangrienta enfermedad que nos arrebató a quienes hicieron nacer nuestra pasión por la pesca.
Muchos pequeños guiños
En un momento en que la nostalgia por los aparatos antiguos se siente más que nunca, con Frank hemos querido revivir las musettes, los bastones, las redes de hilar y las cestas de asiento de nuestros abuelos. Todos estos objetos que mirábamos con asombro, envidia y preguntas cuando éramos niños están ahora en la pantalla. Estos objetos son los testigos mudos de un pasado cercano con un olor particular, historias, una vidaâ?¦
Ah, ¡si pudieran hablar! El pequeño remolque que utiliza Killian para ir a pescar solo también tiene una historiaâ?¦ Es la de un amigo, Christophe, con el que solÃa ir al Canal cuando era adolescente. Yo tenía una muy parecida. Pero la inscripción No Kill aportaba un plus innegable para transmitir este mensaje que ya nos era tan querido. El cuaderno donde escribe Killian no es otro que el de Frank, donde se recogen los datos del joven pescador que fue. Así pues, ¡la preocupación por el detalle ha guiado en gran medida la elección del atrezzo de la película!
Berry y Bourbonnais en el punto de mira
Los lugares donde se desarrolla la historia son Berry y Bourbonnais. Tierras donde todo empezó para nosotros y donde nuestros abuelos nos dieron este virus lleno de valores. En aquella época, recorrÃamos los rÃos para practicar la pesca con la boulée en busca de bonitos goujons, pescar con un remo para capturar sombríos y cucarachas o pescar con un pipée (saltamontes)âeuros¦ Así es como el río Allier y sus afluentes son testigos de recuerdos inolvidables al igual que los estanques del bosque de Tronçais o el río Petite Creuse.
La pesca de la carpa, ya fuera en un estanque o en un río, consistía simplemente en pescar con un corcho y un señuelo de patata o maíz. Y no es casualidad que Killian utilice estas técnicas para pescar eficazmente su bonita carpa en la película, cuando sale a pescar solo con su carro. Desde entonces, la pesca ha cambiado mucho, pero todo sigue en nuestras cabezas. Killian sólo acertó una vez, ¡pero la buena! Creo que le dio a uno de los mejores peces del estanque, si no al más grande.
Este pedazo de agua es el hogar de muchas carpas pequeñas. Pues bien, "Kiki" consiguió seducir a un pez de buenas proporciones. Observamos este golpe de lÃnea con cierto asombro y nuestros recuerdos del pasado no estaban lejos para todos nosotros, ahora adultos. En silencio, nos identificábamos con él cuando éramos niños. Recordamos el orgullo que sentíamos al relatar nuestras primeras salidas de pesca en solitario. Y qué decir del orgullo que sentÃan nuestros mayores al escucharnos. Secuencia emocionalâeuros¦
Un viento de frescura e imprevisibilidad sopló sobre el plató
La furgoneta de 2 CV que aparece en la película nos la prestó Jean, antiguo profesor de mi escuela. Fui con su yerno Vincent al lugar de rodaje para reunirme con Frank, Killian y su "verdadero padre" Christophe Reveret. El viaje fue épico De hecho, ¡casi no llegamos! El motor amenazaba con ahogarse... Vincent jugaba constantemente con el estrangulador para evitar una avería.
Al llegar al lugar, el deudeuch estaba en plena forma para el rodaje. Aunque parezca mentira, ¡la vuelta siguió siendo épica! De vuelta a 40 km/h maxâeuros¦ creo que estaba haciendo de las suyas. ¡Que la filmaran sí! Pero muy reticente para el resto. Los 30 km fueron muy largos.
Afortunadamente, siguen siendo buenos recuerdos, al igual que la escena en la que estoy con Killian en el coche, que se hizo entre risas. A Killian le hizo bastante gracia mi incompetencia al volante de este deudeuch recalcitrante. Debió pensar que no tenía carné de conducir Creo que lo recordará durante un tiempo
Y luego, como en cualquier rodaje, ¡hay sorpresas! Algunas escenas no estaban previstas en el guión. El enriquecimiento viene al ritmo de lo inesperado. Por ejemplo, el momento en que Killian se enreda entre los árboles refleja perfectamente lo que vivimos con nuestros abuelos, que con el tiempo habían adquirido esa formidable paciencia, esencial para la transmisión.
La escena en la que partimos el pan también es muy simbólica. A la orilla del agua, nuestros abuelos sentían cierto orgullo al vernos comer con tanta avidez. Y tuvieron la oportunidad de darnos lo que necesitábamos. Y eso no tenía precio para una generación que había conocido la guerra y la miseria. No lo olvidemos.
Killian, un pescador apasionado
Debo reservar las palabras finales para Killian, mi hijo en la historia a la edad de seis años. Es un auténtico apasionado de la pesca que ha crecido mucho desde entonces. Ya tenía para su edad un cierto dominio de este arte. Este virus se lo transmitió su padre Christophe. Yo sólo soy el "padre de la película".
Sin embargo, desde los primeros momentos del rodaje, se estableció una cierta complicidad entre los dos. No es fácil para un niño de esa edad actuar como si yo fuera su verdadero padre. Desempeñó plenamente su papel. Su espontaneidad, su amor por la pesca, sus ganas de hacerlo bien y de agradar, transformaron el rodaje en un verdadero y sincero momento de compartir. Ya fuera Frank detrás de la cámara o yo a su lado, veíamos la maravilla en sus ojos. ¡La transmisión es preciosa!