Una aventura para los amantes del kayak
Tras una semana de tiempo desastroso, los cielos se despejaron durante la noche y hace un hermoso día soleado para los valientes que van a realizar el descenso. Esta aventura náutica permite descubrir uno de los ríos costeros más bonitos de Bretaña. La salida está en Bénodet y los participantes se dirigen río arriba hacia Quimper. El recorrido es de 16 km. Tanto si es un principiante como un kayakista experimentado, este evento está abierto a todo el mundo. Kayak, canoa, remo, piragua o dragon boat, siempre que flote y se deslice.
El buen humor y el placer de remar juntos son el motor de este momento de compartir y convivencia. Cada año, además, hay un tema de vestuario para dar un toque de color al agua. Este año, el tema era el poder de las flores, y tuvimos mucho donde elegir en cuanto a colores. Todo el mundo participó en el juego, e incluso algunos de los barcos estaban en consonancia con el tema.
Una multitud de socios
Este acontecimiento también cuenta con el apoyo de varios socios, que desempeñan un papel fundamental en la tómbola que cierra este maravilloso día, ofreciendo numerosos premios. Por citar sólo algunos de ellos, empezaré por el más importante a mis ojos, porque está a nuestro lado, en toda Francia, en el agua: la SNSM. Este año estuvo representada por la SNS 219, la estación de botes salvavidas de Bénodet Ste Marine, y su compromiso y profesionalidad fueron esenciales para el éxito de la jornada. Muchas gracias por su dedicación durante todo el año.
La asociación Breizh Polynesia Brest también estuvo presente, proporcionando un colorido y alegre telón de fondo el domingo antes del comienzo de la carrera. La playa de Trez, en Bénodet, tenía un aire tahitiano... Van Lovers, que ofrece furgonetas personalizadas, contribuyó a la tómbola donando muchos calcetines y gorras, añadiendo un toque de estilo y espíritu festivo. El Club de Voleibol 29 de Quimper también estuvo presente para donar premios (entradas para los partidos), y también estuvo en el agua con un bonito barco decorado. Le télégramme de Brest dio cobertura mediática al acontecimiento y publicó numerosos artículos al respecto.
Por supuesto, las ciudades de Quimper y Bénodet se sumaron a la iniciativa, al igual que los empleados municipales, que instalaron el mobiliario urbano correspondiente y señalizaron las vías de acceso a los lugares. También se donaron numerosos premios, entre ellos la famosa loza de Quimper. Galaxykayaks France, que sigue el raid desde hace varios años, ofreció el premio principal de la rifa, un precioso kayak de pesca Ranger para uso en agua dulce y en el mar. Lo ganó un simpático equipo de la región parisina, vinculado a la zona y que había participado el día anterior en el Trail de l'Odet. Es justo decir que conocen el Odet desde todos los ángulos, así que enhorabuena y feliz navegación en el futuro.
También se prestaron para la ocasión varios kayaks, individuales, dobles o familiares. Al final del acto, una vez repartidos todos los aperitivos, aún sobró fruta. Para evitar desperdicios, y en un espíritu de solidaridad, esta fruta se donó a Secours Populaire du Finistère. Esta iniciativa se inscribe en el espíritu del Descenso del Odet, que consiste en apoyar las iniciativas locales de ayuda a los desfavorecidos.
Esta 42ª edición, que atrajo a más de 1.100 participantes, fue un verdadero éxito gracias a todos los voluntarios, el personal del club y los colaboradores privados y públicos (pido disculpas por los que no he mencionado), así que gracias a todos y nos vemos el año que viene.
