La pesca del besugo también es divertida en invierno

El besugo también puede pescarse en invierno. © Benjamin Le Provost

Cuando se piensa en la pesca del besugo, se suele pensar en primavera o verano. Pero no es así: este pez abunda a medida que se acerca el invierno, lo que propicia una pesca estupenda.

Gran número de doradas

Por sorprendente que pueda parecer, el final del otoño y el principio del invierno son ideales para la pesca del besugo.

En esta época del año, estos peces se reúnen en bancos compactos, ofreciendo a los pescadores oportunidades excepcionales. En mi última salida, mi sonda Lowrance HDS 10 Pro reveló un banco de peces impresionante.

Capture d'un sondeur montant un très gros banc de dorades.
Captura de una sonda captando un banco de doradas muy grande.

Esta reunión tiene lugar antes del desove, que se produce en pleno invierno.

Al igual que muchas especies que se preparan para reproducirse, las doradas se vuelven más agresivas y reaccionan mejor ante sus presas. Así que es el momento perfecto para una gran pesca.

El besugo es un pez muy resistente y, por supuesto, es posible y recomendable no matarlo siempre que sea posible, siempre con vistas a preservar el recurso.

Pesca sencilla y divertida

Si hay una especie que no requiere equipos sofisticados, ésa es la dorada. Este tipo de pesca es accesible para todos y sólo requiere aparejos sencillos y eficaces.

En primer lugar, puede hacer un montaje básico con una platina y una pila, a la que se fijará un anzuelo de tamaño 1 ó 2. Este montaje es más que suficiente para desencadenar las picadas.

La segunda opción, aún más sencilla, es utilizar un jig en el que se puede enganchar un trozo de calamar, berberecho o caballa. Estos tres cebos son los alimentos preferidos de las doradas y tienen la ventaja de que se sujetan muy bien en el anzuelo.

Il suffit d'escher un appât directement sur le jig pour le rendre beaucoup plus pêchant.
Basta con fijar un cebo directamente al jig para hacerlo mucho más pescable.

La pesca del besugo: una excelente experiencia de aprendizaje para jóvenes y mayores

Una vez localizado el banco, podrá realizar una serie de capturas. Conseguirás muchas picadas, lo que la convierte en una pesquería de iniciación ideal para principiantes.

Para pescar una dorada, es esencial sentir bien la picada, pero también dominar el arte del anzuelo. La boca de este pez es pequeña y relativamente difícil de morder, lo que requiere precisión y sincronización.

Une fois la technique maîtrisée, les touches s'enchaînent, pour le plus grand plaisir des pêcheurs et des pêcheuses.
Una vez dominada la técnica, las capturas no dejan de sucederse, para deleite de pescadores y pescadoras.

Es una forma excelente de que tanto los principiantes como los pescadores experimentados perfeccionen su técnica y desarrollen buenos reflejos.

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