Nombre científico
Sepia officinalis (Linneo, 1758)
Morfología
La sepia tiene un cuerpo ovalado cubierto de piel que puede cambiar bruscamente de color bajo la acción de su cerebro, muy evolucionado. Este cefalópodo tiene una concha interna bajo la piel del lomo: el famoso hueso de la sepia. La sepia tiene una aleta a lo largo de todo el cuerpo. Su gran cabeza tiene dos ojos laterales y esconde una boca con dos mandíbulas, similares a las del pico de un loro. Alrededor de la boca tiene diez tentáculos con ventosas de distintos tamaños.
Lugares de pesca
La sepia se encuentra a veces en zonas rocosas, pero a menudo semienterrada en el sedimento sobre fondos arenosos, fangosos o cubiertos de algas. Se captura en zonas portuarias, muelles, diques rocosos, especialmente cerca de las luces por la noche entre la superficie y la profundidad media. La sepia suele capturarse entre 6 y 30 m de profundidad.
Técnicas de pesca de la sepia
Desde los barcos, las sepias están presentes a partir de agosto. Desde la orilla, son activas a medida que se acerca el invierno en las zonas portuarias a lo largo de las rocas, donde cazan sobre todo de noche. Si ataca trozos de pescado y señuelos blandos, hay que pescarla con un señuelo duro llamado jig, que tiene una cesta con múltiples púas para evitar que se atasque. Cuando golpee el señuelo, enróllelo continuamente para evitar que se cale. Tenga cuidado, la tinta es indeleble, una vez que la sepia esté en la red, déjela escupir 2 o 3 chorros de tinta en el agua antes de ponerla en seco, como en un barco.

Reproducción
Durante la época de reproducción, en primavera, las sepias se acercan a la costa y ponen entre 150 y 4.000 huevos entre junio y julio.
Tamaño y peso
Con una media de 15 a 25 cm (sin tentáculos), las sepias pueden crecer hasta 50 cm.
Es bueno saberlo
Su método de caza es formidable: chorros de tinta para cegar a la presa, apresamiento con los dos largos tentáculos, inyección de un veneno y posterior desgarro por sus mandíbulas córneas. Los claros cortes en un señuelo blando o un pez vivo indican la presencia de sepias